Miguel Lifschitz juró y ya es gobernador de Santa Fe
El ingeniero Miguel Lifschitz juró este viernes en el cargo de gobernador de Santa Fe en reemplazo de Antonio Bonfatti. La ceremonia se realizó en la Legislatura, ubicada en la capital provincial, ante la Asamblea Legislativa. Allí, el flamante mandatario pronunció un discurso en el que de alguna manera se sumó al cambio de clima que ya se vislumbró este jueves, en la asunción de Mauricio Macri como presidente: hizo especial énfasis en que su gobierno será de diálogo, invitó a sumarse al mismo a quienes lo enfrentaron en las elecciones –Omar Perotti y Miguel del Sel (ambos presentes en la Legislatura)– y prometió respeto absoluto hacia los que piensan distinto. Más tarde, Lifschitz recibió los atributos del mando –banda y bastón– de parte de Bonfatti en una emotiva ceremonia en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, donde no cabía un alfiler. Allí, el mandatario electo volvió a hablar: agradeció a los presentes, insistió que buscará consenso para todos los temas y agradeció especialmente a su antecesor, de quien dijo que hizo una “gran gestión”.
“Del Sel y Perotti estarán a mi lado”, afirmó. Además, varias veces nombró y elogió a sus antecesores socialistas, Hermes Binner y Antonio Bonfatti, de quienes dijo que le abrieron el camino.
“Vamos a hacer del diálogo una actitud permanente de nuestro equipo de gobierno”, sostuvo. Y prometió “escuchar con humildad, sin soberbia, sin autoritarismo, sin descalificar a los que piensan distinto”.
También como Macri, puso en foco la necesidad de combatir la corrupción. “Voy a encabezar combatir un gobierno honesto, transparente, decente, siguiendo la impronta de las gestiones de Binner y Bonfatti”.
Además, anunció obras, entre ellas la finalización de los hospitales, combatir con dureza el narcotráfico y también que apuntará con todo contra el narcortráfico pero también asistirá a los consumidores con un nuevo programa. Además, planteó la necesidad de reformar la Constitución santafesina y que buscará un acuerdo para ello.
El hasta hoy senador departamental por el socialismo es el mandatario número 87 de la historia santafesina desde 1815, cuando juró en el cargo Francisco Candioti, el primero a partir de la organización nacional.
Lifschitz, además, se convirtió el tercer gobernador socialista de la provincia tras los mandatos de Hermes Binner (2007-2011) y Bonfatti (2011-2015) y prestó juramento a las 10.20 en la sede legislativa.
En tanto, el traspaso de los atributos de mando se llevó a cabo en el Salón Blanco de Casa de Gobierno –hacia donde se trasladaron a pie–.
Diálogo, transparencia y combate a la droga
El gobernador expuso durante casi 50 minutos el programa que llevará a cabo al frente de la Casa Gris. Llamó al Poder Judicial, a los legisladores y a SUS competidores electorales Omar Perotti y Miguel Del Sel a trabajar en conjunto.
El gobernador Miguel Lifschitz llevó a cabo su primer discurso ante la Asamblea Legislativa que duró aproximadamente 50 minutos luego de jurar como titular del Ejecutivo provincial. Se mostró en sintonía con la línea que expresó el presidente Mauricio Macri este jueves al señalar que su gestión será de «puertas abiertas, de diálogo», que enfrentará el narcotráfico y la corrupción, y que buscará que el Estado sea «más eficiente». Adelantó la creación de un programa provincial de prevención y concientización del consumo de drogas y un plan para impulsar la hidrovía Paraná-Paraguay.
Al comenzar su discurso, Lifschitz agradeció la presencia de los competidores electorales Omar Perotti y Miguel Del Sel –a quienes calificó como «dignos adversarios»– y les pidió trabajar en conjunto. Además, agregó que el resultado electoral fue el «más reñido» de la historia santafesina y que interpretó «cabalmente» el mensaje de las urnas. «La impronta del nuevo gobierno será de diálogo, de concertación, de puertas abiertas. Quiero que se caracterice por dos palabras: escuchar y humildad», añadió.
El ex intendente de Rosario anunció una serie de medidas que tomará en la gobernación, entre ellas, convocar a los legisladores provinciales para que trabajen en la reforma de la Constitución santafesina. “Trabajaré codo a codo con ambas cámaras”, precisó.
«Nuestro gobierno será de acción, con ideas y efectividad para implementar políticas públicas. Sin soberbia ni autoritarismo y sin descalificar a los que piensan distinto. El doble discurso nos hizo mucho daño», comentó.
El titular de la Casa Gris también hizo un llamado al Poder Judicial para «trabajar de manera efectiva ante el reclamo de la gente de que no haya más impunidad ni idea de impunidad». «Tenemos que perseguir a los delincuentes hasta el último rincón y aplicar sanciones. Y si están en las filas del Estado deben caer primero que los otros y las sanciones deben ser ejemplificadoras», agregó.
En este marco, el ex senador departamental deslizó que impulsará una reforma a la justicia penal. para que esté «en sintonía con la demanda de la sociedad». A su vez, apuntó que impulsará «las causas de mayor impacto social, sea ante la Justicia provincial o federal».
Lifschitz también confirmó que su gobierno tendrá la ya anunciada Junta Provincial de Seguridad, algo que informó en Rosario a distintos gremios.
Entre las medidas mencionadas, informó que su gobierno tendrá como prioridad impulsar «un proyecto estratégico para el norte santafesino, para integrarlo al norte grande». En este sentido, manifestó que buscará realizar tareas en conjunto con las provincias vecinas y adelantó que en febrero próximo promoverá «la hidrovía a Paraná-Paraguay».
Por último, enfatizó que intentará potenciar la productividad de Santa Fe a través de obras públicas, inversión privada y programa estratégicos.
(Rosario3)