El desarrollo bélico colateral que se opone al ISIS

Ante el desasosiego que hoy impera en Francia Barack Obama decidió profundizar los mecanismos de seguridad territorial en Estados Unidos ante la mínima posibilidad de un desarrollo colateral de la agresión fascista del grupo terrorista ISIS.

No sólo ordenó mayor control por parte de las agencias estatales de seguridad ante posibles agresiones provenientes del exterior, sino de las que puedan generarse en el interior de los Estados Unidos, incluso lo que corresponde por si algún grupo intentase atacar la Casa Blanca.

Se trata esta última de un predio de 18 hectáreas, donde conviven 132 habitantes aproximadamente, protegidos por sensores subterráneos y una guardia permanente de francotiradores en el perímetro exterior. Los francotiradores utilizan rifles calibre 308, que poseen el alcance de 800 a mil metros (ajustable según las circunstancias).

La Casa Blanca posee un sistema que detecta disparos y en segundos marca, con precisión absoluta, la ubicación del francotirador agresor, a la vez que se ha instalado un sistema de defensa por onda de choque que distingue sonidos que puedan producirse por combate externo.

Ante un posible ataque se pone en funcionamiento un protocolo defensivo que actúa en tres círculos concéntricos, de afuera hacia dentro: El primero es responsabilidad de la policía local; el segundo lo conforman la referida policía y miembros del FBI, mientras que el tercer posee efectivos del FBI, agentes secretos y una guardia especial que tiene como principal objetivo rescatar al presidente y ponerlo a resguardo.

Es poco conocido que la casa del presidente está protegida también por un anillo de misiles antiaéreos y se posee una conexión rápida para instalar –vía aérea- a Obama con un aparato que posee autonomía de vuelo para conducir al país desde el aire ante situaciones de catástrofes de todo tipo.

Lo enunciado no forma parte de las millones de películas y series, es por el contrario información real que a pesar de todo diariamente debe enfrentar la amenaza más difícil de resolver: el ataque de un asesino individual.

Cualquier presidente estadounidense, en situaciones de crisis, no dicen, está obligado a utilizar un traje “blindado” que ha sido confeccionado con telas de alta tecnología incorporada como para soportar disparos de una 357 o una ametralladora UZI.

El secretario de Estado norteamericano, John Kerry entiende al ISIS como un “agresor medieval” que se ha valido de la crisis de los refugiados para inyectar entre marginados y perseguidos de una guerra que parece interminable a terroristas radicales dispuestos a inmolarse en pos de un objetivo: la Guerra Santa, la resultante de un colonialismo cruel, una juventud que sufre manipulaciones varias, la crisis de 2008 y la guerra Siria que se expande hacia Europa como una metástasis. A ello suman los especialistas en temas internacionales “el fallido Estado de Irak” tras la ocupación de 2003 que derivó en masacres y la aparición pública de Abu Al Baghdadi, quien creó el califato del ISIS “copado” por mercenarios de Saddam Hussein. [1]

De esta guerra en la que se ha embarcado Francia seguramente en las próximas semanas los medios de comunicación obtendrán mucho material en el que la muerte será, sin duda, la principal protagonista.

No se extrañe el lector que lentamente comience a escuchar que se utilizarán más asiduamente robots militares urbanos, con cámaras de video destinados a rodear perímetros que son utilizados como depósitos de bombas. El espionaje y la posterior destrucción no implica la utilización de soldados de infantería en operaciones y ello configura la disminución sustancial de efectivos muertos en combate.

Los robots estarán comunicados con naves teledirigidas que sólo tienen alas de 1,2 metros de envergadura, cuya misión es proporcionar imágenes. Paralelamente vehículos del tamaño de una cortadora de césped avanzarán sobre el objetivo utilizando ametralladoras y lanzadores de granadas.

Todos estos elementos bélicos son conducidos por técnicos que utilizan mochilas y se hallarán fuera de la línea de fuego. Los jóvenes de hoy leerán esto y se imaginarán matando gente como si estuvieran manejando un videojuego, aunque en este caso los seres humanos mueren de verdad. La cámara busca a los francotiradores, luego la ametralladora dispara ráfagas cortas y rápidas, los robots lanzan las granadas y así se destruye el objetivo.

Ventajas

Es obvio que las fuerzas francesas, se admita o no públicamente-, recibirán el “aporte” de la NATO y la utilización de la maquinaria bélica ante detallada tiene ventaja tales como: No se distrae, utiliza ojos digitales que o parpadean, detectan hasta el más mínimo movimiento y “no se asustan por el fuego enemigo”.

El lector que suponga que lo antes descripto es producto de un periodista afiebrado, le señalo que Ron Arkin, un especialista en armamento declaró recientemente al New York Times que “56 países están desarrollando en el orbe armas robóticas”.
Los que están a favor del uso de la inteligencia artificial en la guerra subrayan que “el uso de soldados de manera masiva implica correr mayores riesgos, mientras que el uso de la I.A., implica la inexistencia de errores éticos”.

Arkin también sostiene que “se pueden construir robots que usen leyes de guerra y reglas militares. Incluso hay robots que se desempeñan en terrenos escarpados, alejados de carreteras que pueden transportar hasta 180 kilos hasta 32 kilómetros haciendo equilibrio, logrando subir cuestas empinadas y superficies heladas”.

Algunos robots son utilizados como centinelas nocturnos para evitar infiltrados en campamentos, ya que poseen visión térmica y disparan armas laser indetectables por el enemigo, ya que no emiten calor humano. Algunos disparan granadas de gas lacrimógeno.

Por el contrario, opositores de la Universidad de Yale, conducidos por a. Wallace, apuntan que “a corto plazo, de robotizarse la guerra las ventajas quedarían neutralizadas por las consecuencias a largo plazo”.


[1] Claudio Mario Aliscioni.

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Ricardo Marconi

Licenciado en Periodismo. Posgrado en Comunicación Política. rimar9900@hotmail.com