Redujeron el número y a Rosario solo arribarán 400 gendarmes
Tiempos violentos. Se sumarán a los que ya hay en la ciudad y en total llegarán al millar. Comerán en la ex Rural y se alojarán en aparts y en hostels céntricos.
Al final, los gendarmes que desembarcarán la semana próxima en Rosario serán 400. Inicialmente se mencionó que la cifra del nuevo operativo era mil agentes, luego se redujo a 600 y ahora se habla de «400 integrantes de Gendarmería que se sumarán a los 600 que hay actualmente en la ciudad, lo que contabiliza mil», según precisó el secretario de Seguridad Pública provincial, Gerardo Chaumont. El funcionario contó que hubo más avances en la logística del retorno: habrá un campamento de campaña para alimentar a las fuerzas federales en la ex Rural de Rosario y los agentes se alojarán en aparts o bien en hostels.
La cuenta regresiva para que se concrete el refuerzo de Gendarmería para las principales ciudades de la provincia sigue sumando sorpresas. A los cruces políticos que calentaron la previa se agregó en las últimas horas las idas y vueltas respecto al número de efectivos que arribarán a Santa Fe.
La semana pasada, cuando el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, le había anticipado a los diputados nacionales santafesinos del PJ que la Casa Rosada accedía a enviar fuerzas federales a Rosario, se mencionó como cifra mil gendarmes. Y sólo para esta ciudad.
El lunes, tras la reunión entre Berni y el gobernador Antonio Bonfatti, donde se limaron asperezas y se acordó el retorno de las fuerzas federales a la provincia, se precisó que iban a ser 600 los gendarmes que llegarían a Rosario.
Allí se aseveró que otros 300 agentes iban a patrullar las calles de la ciudad de Santa Fe y otros 50 las de Rafaela, Reconquista y Venado Tuerto, contabilizando en total 1.050 efectivos.
Ayer la cifra volvió a cambiar. Chaumont precisó: «La semana próxima, no sabemos aún qué día con exactitud, habrá en Rosario mil agentes de Gendarmería, sumando entre los que hay ahora y los que vendrán en la nueva tanda».
En tren de aportar datos más exactos, el secretario de Seguridad Pública de la provincia agregó: «Desde fines del año pasado (cuando se fueron de la ciudad cerca de 2.000 agentes federales que habían llegado en abril), el Destacamento Móvil Nº 2 de Gendarmería en Rosario tiene unos 600 agentes. A ese número hay que agregarle otros 400 y entonces serán mil los agentes que tendrá la ciudad la semana que viene».
Igual, el funcionario provincial ponderó el desembarco de fuerzas federales a la región. «Lo importante es que habrá un refuerzo de Gendarmería para las tareas que viene desarrollando la policía provincial y que nos ha permitido bajar el delito en lo que va del año», resaltó.
Chaumont comentó además que ayer continuaron las conversaciones entre los equipos técnicos de ambas fuerzas para ultimar los detalles del operativo retorno a la provincia. En ese sentido mencionó que está prácticamente acordado que se montará «una cocina de campaña en el predio de la ex Rural para que los gendarmes almuercen o cenen».
Respecto al alojamiento, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública apuntó que «al igual que el año pasado se están buscando aparts hoteles que tienen más comodidades que una habitación convencional o bien hostels (habitaciones compartidas) en el centro».
Por su parte, el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, sostuvo que las fuerzas federales deberían quedarse más allá de fin de año. «Esta permanencia debe extenderse en el tiempo. Sabemos que son fuerzas móviles y que están de acuerdo a los requerimientos y a las necesidades, pero es necesario tener y jerarquizar una base de Gendarmería en esta provincia, porque es de las provincias grandes y de las que tiene mayor complejidad. Por eso es fundamental que esta coordinación tenga permanencia», sostuvo.
Consultado sobre un eventual recelo entre los efectivos de la policía provincial y Gendarmería, el funcionario fue claro: «La policía sabe que en los estados modernos siempre hay colaboración de esfuerzos. No existen policías exclusivas, sino de complementariedad y así debe funcionar», dijo.
«Si no vienen a Gálvez habrá gran despelote»
El intendente de Villa Gobernador Gálvez, Pedro González, amenazó ayer con armar «un despelote de la puta madre que los parió» si la Nación no destina a su localidad parte de los efectivos que desembarcarán la semana próxima en la provincia para reforzar la seguridad. Al respecto, el secretario de Seguridad Pública, Gerardo Chaumont, reconoció que «todos quieren presencia de fuerzas federales. Pero no los podemos clonar». Igual, el funcionario no descartó que lleguen a Gálvez algunos gendarmes.
González fue por demás de efusivo: «Si no viene Gendarmería a Gálvez voy a hacer un despelote de la puta madre que los parió. Porque acá miran siempre para el costado, menos para el que más necesita», lanzó.
El jefe comunal sostuvo que «no pueden dejar a Gálvez afuera, es una locura, es una ciudad con mucha complicidad (sic). Porque los chantas de allá (por Rosario) se vienen para acá, así que estamos en la misma».
«Cuando vino Gendarmería —continuó—se paró todo, ahora se dieron algunos casos y si viene Gendarmería, seguramente lo vamos a paliar bien», agregó.
No obstante, González aclaró que con el gobierno socialista tiene buena relación. «Me llevo bien con (el gobernador, Antonio) Bonfatti, pero todavía no lo llamé porque no me quise anticipar, pero calculo que en estos días voy a hablar. Con (el ministro de Seguridad, Raúl) Lamberto tampoco tengo problemas, es un buen hombre, no tengo ninguna clase de problemas con ese gobierno», sostuvo.
Chaumont admitió la legitimidad del reclamo de González. «Todos los intendentes quieren más seguridad, es lógico. Pero nosotros no los podemos clonar. Iremos definiendo las zonas de acuerdo a las necesidades y al mapa del delito. No descarto para nada que en algún momento se pueda concretar», enfatizó.
(La Capital)