La balacera en el boliche Loft se atribuye a discusiones futboleras
Ayer se conoció un ataque a balazos a tres jóvenes que estaban en la puerta de un boliche de Pichincha. Con el correr de las horas se conocieron más detalles: hubo un cuarto baleado cuando llegaba a su domicilio; el problema se suscitó entre hinchas de fútbol y dos de las víctimas están en cuidados intensivos.
Cuatro simpatizantes de Rosario Central fueron atacados a tiros en la madrugada de ayer en la puerta de un boliche bailable de Pichincha, donde momentos antes se habían trenzado a golpes de puño con hinchas de Newell’s Old Boys. Los heridos tienen entre 19 y 26 años y hasta anoche, dos de ellos se encontraban en sala de cuidados intensivos con estado reservado. Allegados a las víctimas dijeron que la pelea se armó dentro del sector VIP de Loft, un local nocturno ubicado en Ricchieri 33 bis, pero que luego siguió en la vereda cuando dos muchachos a bordo de un vehículo rociaron a tiros a tres de sus contrincantes, en tanto un cuarto fue baleado cuando descendió de un taxi en la puerta de su casa.
Ayer, los colores auriazules se veían en las entradas de los hospitales Centenario y Clemente Álvarez, donde amigos de los simpatizantes canallas hacían guardia. “No se aguantan un cachetazo y fueron a buscar armas”, dijo uno de ellos para referir la riña que tuvo lugar dentro de Loft. Luego, en la puerta, vino la venganza pero esta vez con armas.
Según información oficial, a las 5.15 de ayer ingresó al Heca Daniel Ch. de 25 años con una herida de arma de fuego en la zona lumbar. A esa hora y trasladados por amigos ingresaron al Centenario Luciano J., alias Luchito de 22, con un tiro en el tórax, y Sergio C., conocido como Tetero de 26, baleado en el muslo. Una hora más tarde, Genaro G., alias Chelito de 19, llegó al Heca trasladado por el Comando Radioeléctrico con un tiro en la pelvis.
“Pasaron dos pibes de Newell’s que habían cobrado adentro y tiraron desde un Volkswagen Gol Trend color negro”, dijo un testigo que agregó: “Chelito se tomó un taxi y lo siguieron, apenas se bajó en la puerta del Fonavi le dispararon como siete veces. A uno de los que disparó le dicen Juanchi”.
Fuente: El Ciudadano