Un jefe de la Policía de Acción Táctica fue detenido por un crimen de 2011
Una demorada investigación. El oficial Mario Urquiza, a cargo de Logística en la nueva fuerza, fue imputado por la «persecución» y muerte de Sergio Luján.
Un oficial de la Policía de Acción Táctica (PAT) fue detenido bajo la acusación de haber matado a un muchacho de 19 años en Pueblo Esther hace tres años en un hecho que, en aquel momento, fue presentado como un enfrentamiento protagonizado entre la víctima y efectivos de la subcomisaría 15ª tras una persecución. Pero ahora una investigación judicial determinó a través de pericias y testigos que fue el uniformado quien disparó el balazo que terminó con la vida del joven.
El inspector Mario Ariel Urquiza fue hasta ayer jefe de Logística de las flamantes PAT y fue imputado de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y calificado por pertenecer a la fuerza de seguridad. A esa acusación llegó la Justicia luego de que el 30 de abril pasado fuera señalado por cuatro testigos en una rueda de personas en Tribunales como quien le disparó a Sergio Ezequiel Luján, de 19 años, el 1º de diciembre del 2011. Tras ello el fiscal Carlos Covani requirió la detención y la prisión preventiva del oficial y el juez de Instrucción Juan Andrés Donnola ordenó el arresto. Ese mismo día Urquiza fue indagado bajo la asistencia del abogado Guillermo Raúl Alexander.
Primera versión. Fuentes policiales señalaron en su momento que el suceso se desencadenó cerca de las 20 del 1º de diciembre del 2011. A esa hora, dos efectivos de la subcomisaría 15ª de Pueblo Esther realizaban un patrullaje de rutina y en Venezuela y Juan Domingo Perón distinguieron a dos jóvenes que transportaban unos bultos. «Al advertir la presencia del personal policial estas personas escaparon corrieron en diferentes direcciones. Los efectivos impartieron la voz de alto, pero los sospechosos efectuaron varios disparos y los uniformados repelieron la agresión con sus armas reglamentarias», dijeron.
A raíz del tiroteo Luján se derrumbó malherido, fue trasladado al hospital Gamen de Villa Gobernador Gálvez pero su vida se apagó en el camino mientras que su cómplice alcanzó a escapar. La policía reportó en ese momento el secuestro de tres armas en poder de Luján: un revólver calibre 22 y dos pistolas calibre 9 milímetros.
Sin embargo, la Justicia determinó que la versión policial no coincidía con el relato de los testigos, quienes contaron que dos policías perseguían a dos pibes aunque no se pudo establecer que hubieran cometido un robo. «Al parecer les pedían plata a comerciantes, pero no se pudo acreditar que llevaran bultos», explicó una fuente judicial.
Testimonios y pericias. Según el relato de los testigos, el policía que estaba con Urquiza salió tras el cómplice de Luján mientras el oficial detenido «detuvo a Sergio y lo metió en el patrullero. Después se bajó del móvil para colaborar con el otro agente en la búsqueda del que había escapado. En ese momento Luján aprovechó la distracción del policía y también se bajó del patrullero», explicaron en el juzgado.
Entonces el muchacho corrió tres o cuatro metros y en ese momento, según los testigos, «sin darle la voz de alto», Urquiza le disparó un balazo que le atravesó la espalda. «El policía se acercó (a Luján) y con la ayuda de uno de los testigos lo subió al patrullero y lo llevó al hospital Gamen adonde llegó sin vida».
El vocero consultado indicó que no sólo los testigos apuntan a Urquiza como quien gatilló el balazo mortal con su arma reglamentaria. Las pericias balísticas ubicaron al policía como el autor del tiro fatal. La fuente judicial indicó además que el policía que acompañaba a Urquiza efectuó un disparo intimidatorio cuando perseguía al compañero de Luján. «Se le tomó declaración informativa pero no se determinó su situación procesal», manifestó.
Controversia. La pesquisa por el crimen de Luján tuvo una arista controversial. El sumario administrativo realizado por la División Judiciales fue archivado por disposición del entonces jefe de la policía rosarina, Luis Omar Bruschi, cuando el caso era investigado por el juez Hernán Postma. A partir de la implementación del nuevo modelo penal, el expediente quedó a cargo del juez Juan Andrés Donnola.
Una fuente oficial señaló que el secretario de Control de las Fuerzas de Seguridad, Ignacio Del Vecchio, requirió al jefe de la Unidad Regional II, Miguel Oliva, que Urquiza sea pasado a disponibilidad; y que la División Judiciales continúe con la investigación administrativa.
Por su parte el abogado Oscar Pandiani, que representa a los familiares de Sergio Luján, negó que el muchacho «haya pedido dinero a comerciantes» de Pueblo Esther, desmintió que llevara «bultos» cuando recibió el balazo mortal y señaló que «algunos comerciantes dijeron que estaban desarmados cuando ocurrió el hecho».
Un debut sangriento
El domingo 4 de enero, a días de hacer su presentación oficial, la Policía de Acción Táctica (PAT) mató a Jonathan Herrera, un muchacho de 23 años que lavaba su auto en la esquina de Ayacucho y bulevar Seguí. Fue cuando cuatro uniformados se sumaron a la persecución que agentes del Comando Radioeléctrico hacían de un ladrón. Lo cierto es que Ramiro R., Francisco R., Luis S. y Alejandro G., egresados de la promoción 2014 del Instituto de Seguridad Pública (Isep), quedaron imputados y con prisión preventiva. El primero de los agentes está acusado por el crimen del joven y los otros tres por su participación primaria en el hecho.
(La Capital)