Toniolli repudió los periódicos ataques a entidades barriales
“El respaldo a los espacios de las organizaciones sociales y culturales, a los clubes, a las vecinales, es clave para el combate contra el delito, junto con la decisión de conducir y controlar a la policía desde la Intendencia y con el respaldo de los vecinos”, dijo hoy el precandidato a concejal Eduardo Toniolli, consultado respecto de los periódicos ataques a sedes de centros comunitarios y entidades barriales.
“La organización popular en base a la solidaridad, el encuentro entre los vecinos para impulsar proyectos colectivos, son una barrera contra las bandas dedicadas al delito, que quieren mantener un control absoluto de los territorios. El problema es que toda la gente que apuesta a ese camino del encuentro, del trabajo conjunto, se siente desamparada y olvidada por las autoridades municipales y provinciales, que son las encargadas de garantizar, por lo menos, que no les roben lo que van logrando, que no los ataquen a tiros”, analizó Toniolli.
“Nuestra decisión, tal como lo viene planteando nuestro compañero candidato a intendente Fernando Rosúa, es que la Intendencia se haga cargo del combate contra el delito conduciendo un nuevo esquema de trabajo, a través de 100 comisarías, una por cada barrio, y 30 fiscalías, que atiendan las necesidades de todas las zonas de la ciudad las 24 horas del día”, señaló el primer precandidato a concejal. “Las comisarías, con jurisdicciones más chicas y con los recursos necesarios, estarán dedicadas a la prevención y la interrupción de los hechos delictivos, mientras que las fiscalías barriales contarán con efectivos de la Policía Judicial, creada a partir de un proyecto que impulsé en la Legislatura provincial, que sólo estarán abocados a la investigación y la recolección de pruebas que permitan sanciones rápidas y la desarticulación de las bandas delictivas”, explicó el diputado provincial, que ahora aspira a una banca en el Concejo Municipal.
“Este plan de combate al delito se debe complementar con una mayor presencia del Estado municipal junto a las organizaciones barriales, los clubes, los centros culturales, los espacios de encuentro comunitario, que ofrecen a la comunidad, sobre todo a los niños y los jóvenes, un modo de relacionamiento distinto, con la inclusión como objetivo principal”, sostuvo Toniolli.
“La Presidenta lo definió muy claramente: el mejor antídoto contra la violencia y el delito es profundizar la inclusión, la justicia social. Y es intenso el trabajo del gobierno nacional en este sentido. Pero todo el esfuerzo volcado en programas como la asignación universal por hijo o el Progresar, o en las mejoras en la educación y los servicios de salud, se termina diluyendo si los barrios se transforman en zonas liberadas para el delito sin que nadie asuma la conducción política de las fuerzas de seguridad encargadas de evitar estas situaciones trágicas y dolorosas que nos golpean cotidianamente y que llevaron a Rosario al tope de las estadísticas de homicidios del país”, expresó Toniolli.