Acuerdo cerrado: El radicalismo acompañará a Macri y Carrió
Tras más de trece horas de debate, la Convención Nacional de la UCR aprobó esta madrugada la propuesta de Ernesto Sanz para entablar un acuerdo nacional con el PRO de Mauricio Macri, en medio de un clima de tensión dentro y fuera del Teatro Español, donde jóvenes militantes atacaron a dirigentes.
Por mayoría de convencionales, el senador mendocino se quedó con la postulación presidencial del espacio, ya que Julio Cobos había anticipado que si se aprobaba la idea del senador, él no sería candidato.
La votación resultó 186 a 130, para establecer un pacto con el PRO y la Coalición Cívica de Elisa Carrió, además de flexibilizar los acuerdos provinciales para que los precandidatos a gobernadores puedan ir con varios postulantes nacionales.
La superioridad numérica a favor de Sanz ya había quedado explícita durante la tarde del sábado, aunque luego se formalizó durante la votación formal sobre las alianzas, que tuvo lugar a las 5.20.
Antes del desenlace, los ánimos se calentaron en el teatro entre los dirigentes cercanos a Sanz y el cobismo, que abucheó a todos los que hablaron a favor del entendimiento con el macrismo.
Los senadores nacionales Gerardo Morales y Luis Naidenoff le gritaron «traidor» enfáticamente al dirigente Federico Storani, luego de que éste alentara la postulación de Sanz.
En tanto, en las inmediaciones del edificio se vivieron momentos de suma tensión, ya que la policía debió cerrar las puertas para que la militancia no pudiera ingresar y hubo forcejeos y algunos golpes.
La confusión estuvo a punto de perjudicar la votación, pero las autoridades de la Convención, presidida por Liliana Puig de Stubrin, informaron que la situación estaba bajo control y continuaron con la tarea.
Sin embargo, a la salida del encuentro, militantes radicales contrarios a Sanz, de la Juventud Radical, la Franja Morada y La Cantera, se apostaron en la puerta y arrojaron una bengala encendida hacia adentro, cuando comenzaban a salir los convencionales.
En ese momento, apareció el dirigente Enrique «Coti» Nosiglia, quien fue atacado a botellazos, golpes e insultos. Personal policial debió intervenir en la situación para que Nosiglia pudiera alejarse de la zona.
En tanto, otro grupo de jóvenes le tiró piedras a la camioneta en la que se alejó del lugar Storani, muy molestos con la decisión del partido de avanzar con el acuerdo con el PRO.
Durante la Convención, Sanz subrayó que no quiere «ser el vice de nadie», al rechazar la acusación de sus rivales internos sobre su supuesta idea de integrar la fórmula del jefe de Gobierno porteño en las próximas elecciones presidenciales.
«Yo quiero ser el candidato a presidente de mi partido, aunque no mida en las encuestas», destacó, desatando los aplausos de su sector dentro del teatro y la bronca de los militantes cobistas que coparon las inmediaciones del lugar.
Luego, Cobos tuvo su chance y tras recalcar la necesidad de fortalecer el Frente Amplio Unen, dijo que estaba dispuesto a «acompañar» a Sanz. (Ámbito Financiero)