Estados alterados
Resultaría peligrosamente inflamable para el sistema que los políticos en su exaltación pre electoral utilicen como estrategia para devaluar al opositor la flagelante inseguridad y los inmanejables ajustes de cuentas narcos…
Resultaría peligrosamente inflamable para el sistema que los políticos en su exaltación pre electoral utilicen como estrategia para devaluar al opositor la flagelante inseguridad y los inmanejables ajustes de cuentas narcos, como si fueran pantallas a superar en un patético jueguito de computación, pero que ocurre en la vida real.
El gobierno dio muestras de empeño pero de evidente incapacidad práctica para avizorar y contener el ascendente desborde delictual y la exacerbada violencia, sea ésta interpersonal o por venganza entre bandas, en la mayoría de los casos de iniciados traficantes de drogas que comienzan a disputarse territorios a los tiros limpios.
Pero generalizar temerariamente que «(toda) la policía es cómplice junto con el gobierno y el poder judicial» es inducir a la población a pensar – de hecho una gran parte lo hace – que todo está perdido y lo único que quedaría es la justicia por mano propia. Tampoco es bueno que los funcionarios de uno y otro poder ventilen sus ácidos reproches institucionales a través de los Medios. No ayuda a generar confianza en la sociedad. Más bien todo lo contrario.
Dentro de este incierto marco, la clase política y quienes aspiran a formar parte de ella delinea sus componendas electorales, allende en la mayoría de los casos de los tradicionales «Partidos políticos» que pasaron a ser meras ONGs franquiciantes de voluntariosas alianzas circunstanciales que expirarán tras el recuento del último voto el día de las elecciones; ó propicirán mas tarde en los cuerpos colegiados tantos sub bloques como franquiciatarios existan. O sea, la política como «producto» a «vender», para lo cual se suprimieron los militantes, los «punteros» por el «marketing» y los «expertos en comunicación política» y la quintaescencia contemporánea venerada de manera cuasi religiosa: las encuestas y «el candidato».
En este esquizofrénico estado de cosas que combina la turbación provincial con la incertidumbre nacional, los actores políticos se las arreglan como pueden para salir a escena en el primer acto electoral que seguramente será en Mayo próximo con las Paso provincial.
Un repaso por los espineles políticos nos muestra al peronismo – y la ciencia- intentado develar el fenómeno de física cuántica protagonizado el pasado viernes en Rosario por María Eugenia Bielsa, quien estuvo y no estuvo a la misma vez en la primera reunión rumbo a la unidad (¿o la reconciliación?) partidaria junto al convocante Presidente del Partido José Luis Freyre, Agustín Rossi y Alejandro Ramos. Mientras tres de los presentes ofrecen jurar por sus seres queridos que «La Bielsa» formó parte del cónclave llevado a cabo en un hotel céntrico, la propia ex diputada se encargó se difundir que no estuvo presente, concediendo que compartió un café en el mismo recinto con el Presidente Freyre antes de el intendente de Venado Tuerto se reuniera con Ramos, Rossi y Perotti.
Bielsa repetirá este lunes en Malabrigo para los Departamentos Vera, Gral Obligado, y San Javier el plenario que mantuvo hace una semana en Arocena con los Departamentos del Centro. Mientras Omar Perotti ya está armando la logística comunicacional para salir con todo al ruedo y medirse hasta fin de año.
Semejante grado de confusión le significará a Freyre (que es psicólogo de profesión) una tarea homérica cumplir con los deseos de la Casa Rosada de lograr la unidad del peronismo santafesino; faena que el Secretario Legal y Técnico de Presidencia y mano derecha de la Presidente Carlos Zanini canalizó a través del funcionario y operador político Juan Carlos «Chueco» Mazzón, quien a su vez le pidió la gauchada de acompañarlo en la patriada a un cada vez menos paciente Carlos Reutemann.
La apostólica intención de Freyre ahora es convocar para mediados de Noviembre a otros sectores del libanizado peronismo para ir definiendo un Congreso partidario (que lo reclama para el 17 de Noviembre, Día del Militante Peronista el gremialista rosarino Marcelo «Pipi» Andrada) para que habilite la conformación de «un gran frente» que contenga a todos y a todas.
La disyuntiva que hará arder los debates peronistas la anunciarán los acólitos de Sergio Massa en la Provincia – léase los seis senadores de la Juan Domingo – que la semana pasada acordaron en esta capital con un referente nacional de Massa no formar parte de aquel abarcador paraguas «K», y en cambio edificar su propio frente «por afuera», abriendo generosamente el libro de pases para todos los que deseen cobijarse como precandidatos en cada una de las categorías electorales, sin excluir ropajes partidarios.
Así, desde el 100 % Santafesino de «Cachi» Martínez, pasando por radicales, socialistas, gremialistas de distinto pelaje e independientes con o sin sello propio podrán hacer uso – y abuso – de las encantadoras Paso. Todos bajo la consigna «Massa Presidente», que es lo que verdaderamente importa.
La idea es coagular el derrame hacia el Pro de aquellos sectores que no se sientan identificados con el Frente para la Victoria y que no participarán del «otro frente» que tendrá como máxima universal «Scioli Presidente».
El Pro, mientras proclama la «Tercera Vía» como continente discursivo para atraer al electorado independiente, debate internamente recibir a refugiados de otros sectores que ya avizoran – y dan señales – del destierro en las listas «tradicionales». Naturalmente el camino iniciático será hacia «Macri Presidente».
A mediados de Noviembre bajará a Santa Fe la porteña Fundación Pensar coordinada por Juan C. Mercier, que actuará a manera de soporte intelectual y técnico de la campaña de Miguel del Sel, que caminará la Provincia de la mano de su candidato a senador en cada departamento y el primer candidato a diputado provincial; «no nos volverá a pasar lo del 2011 en que si Miguel hubiese sido Gobernador no hubiera tenido un solo senador, a pesar de haber ganado en casi todos los Departamentos. Lo mismo con la lista de diputados provinciales», aseguran desde el entorno del candidato.
Por la otra avenida, la marca Frente Progresista Cívico y Social (que mide como tal no menos de 40 puntos) deberá esperar a que uno de sus principales accionistas, la UCR defina institucionalmente la pre candidatura de Mario Barletta para enfrentar al precandidato socialista Miguel Lifschitz. En la casa Gris no creen que el actual diputado nacional dé marcha atrás en sus aspiraciones y se pertrechan para la batalla; aunque en el radicalismo hay sectores que propician seguir debatiendo la conveniencia de una interna o lista de unidad; referencias que en definitiva zanjará la Convención Partidaria en su momento.
A diferencia del peronismo y del Pro, que están atados a candidaturas nacionales, en el FPCyS, aun con sus opinables y respetables matices respecto de las apoyaturas, no pende electoralmente la espada del cada vez más desparramado Faunen nacional. En Santa Fe el frente gobierna y quiere seguir haciéndolo por cuatro años más. Casi se podría decir independientemente de quien se siente el 10 de diciembre del año que viene en el Sillón de Rivadavia.
En torno de esos cuatro grandes planetas que aparecen en la constelación política santafesina (PJ «K»; PJ «no K»; Pro y FPCyS) aparecerán los satélites con órbitas más o menos errantes y diferentes fuerzas de gravedad.
El Movimiento Evita decidió por ejemplo ir dentro del «frente K» con listas propias en todas las categorías posibles, auspiciando como candidato a Intendente de Rosario al actual concejal Fernando Rosúa (hijo del ex Ministro de Obeid Roberto Rosúa); senador por La Capital al dirigente del SADOP Pedro Bayúgar (quien se apura a aclarar que además lo acompañarán otras organizaciones sociales).
Una docena de gremios del Sur provincial que apoyan a Sergio Massa le arrimaron al concejal rosarino Diego Giuliano la invitación para que sea su candidato a Gobernador; mientras el titular de Recolección y Barrido, adherido a Camioneros, Marcelo «Pipi» Andrada pugnará por entrar a la Cámara de Diputados de la Provincia como cabeza de una lista propia que también se referenciará con el diputado tigrense.
Dentro de la UCR, el diputado radical sureño Maximiliano Pullaro también orienta sus intenciones electorales hacia una «nueva generación», que en este caso es matizada con hombres y mujeres más experimentadas en la política como el Vice Gobernador Jorge Henn, los intendentes de Santo Tomé Fabián Oliver y Santa Fe José Corral, y referentes territoriales (intendentes, concejales) que forman parte de la simiente que haga política más allá de los turnos electorales del año que viene; en los cuales la mayoría de ellos participará.
El Socialismo advirtió apenas subió al poder en el 2007 que la perdurabilidad se dará mediante la formación de los jóvenes en un Partido cuyos principales dirigentes superan el medio siglo de edad. Es así como Hermes Binner Gobernador creó el Gabinete Joven, inferiores de los futuros equipos de primera del socialismo, y muchos de ellos ya debutando junto a los mayores.
Estados demasiados alterados de la clase política que no ayuda a calmar los ánimos de una sociedad muy inquieta y expectante.