Explosión en la fábrica militar de Beltrán
Los operarios trabajaban en el rellenado de municiones con explosivos. Dos heridos: sufrieron traumatismos y quemaduras.
Dos operarios de la fábrica militar ubicada en la localidad de Fray Luis Beltrán resultaron heridos por una explosión mientras trabajaban en el sector donde se cargan las municiones con explosivos. Los trabajadores, internados con pronóstico reservado en el hospital Eva Perón de la vecina localidad de Granadero Baigorria, de 42 y 50 años, ingresaron con lesiones en el rostro, traumatismos en el tórax y quemaduras por la explosión. Desde el Ministerio de Defensa, cartera de la que depende la fábrica, se pusieron a disposición de la Justicia para esclarecer el hecho, en tanto que hoy se realizarán las pericias sobre el lugar y las maquinarias que estaban manipulando.
Según un parte de prensa emitido ayer por la propia fábrica y al relato de los testigos, la explosión ocurrió a las 10.15 de este jueves en la planta de Sinoxid, en uno de los depósitos ubicados a orillas del río Paraná. Como consecuencia, dos operarios, uno de 42 y otro de 50 años, tuvieron que ser internados con heridas de distinta consideración en rostro y manos.
Las primeras versiones periodísticas señalaban que la explosión liberó una sustancia altamente tóxica, que se encontraba en proceso de amasado, que afectó la vista de ambos, aunque esto no pudo ser corroborado. En declaraciones radiales, el subdirector del Hospital Eva Perón, David Moset, describió el cuadro de los heridos: “Ingresaron con lesiones en el rostro y parte de su cuerpo con signos de haber sido producidas por efecto explosivo. Los traumas son moderados a graves. Están internados con cuidado intensivo y pronóstico reservado”.
Además, detalló: “Padecen lesiones que habitualmente se producen por la alta energía que producen las explosiones e implican traumatismos en cara, en tórax y quemaduras.
Hay que ir viendo cómo responden neurológicamente, aguardar la evolución y su estabilidad hemodinámica”. Al cierre de esta edición permanecían en el centro de salud de Baigorria esperando una buena evolución del cuadro que permitiera su trasladado al Sanatorio Británico de Rosario, indicaron desde la sede local de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
Baja siniestralidad
Roberto Montero, integrante de la comisión de ATE, gremio al que pertenecen los trabajadores heridos, relató qué ocurrió: “Estábamos a 600 metros cuando se escuchó la explosión. Es muy raro. Esperaremos los peritajes que se harán mañana (por hoy)”.
Respecto al lugar de la explosión y los involucrados, señaló que en ese sector, denominado “amasadora de explosivos”, estaban trabajando no más de 10 operarios.
Allí se preparan municiones (de 9 a 22 milímetros y espoletas para morteros, entre otros elementos) y se manipulan materiales para confeccionar gases lacrimógenos.
“Tenemos una baja tasa de accidentes en la fábrica. Creo que el último fue en 1986 o 1989. No es algo habitual. No queremos abrir juicio, así que esperaremos los peritajes”, agregó el gremialista.
Según contó Montero, el herido de 50 años lleva casi tres décadas como operario en el sector de la fábrica donde ocurrió el accidente. El segundo, más joven, tenía pocos años en el puesto pero ambos tuvieron capacitaciones para evitar accidentes laborales, indicaron desde ATE.
“Por suerte contamos con una ambulancia propia equipada y otra más que acudió para trasladarlo al hospital de Baigorria. También contamos con personal de salud laboral que asistió”, mencionó Montero.
Desde la fábrica militar, que depende del Ministerio de Defensa de la Nación, se informó a través de un parte firmado por el director de la planta, Waldemar Enrique Vizzo, y el subdirector, Héctor Javier Tardío: “Se ha ordenado la correspondiente investigación de lo sucedido con el objeto de conocer las causas que lo provocaron”.
Los directivos de la fábrica militar afirmaron que se pusieron “a disposición con las autoridades judiciales federales competentes en relación al hecho”.
En plena actividad
La fábrica militar de Fray Luis Beltrán se encuentra en pleno funcionamiento, ya que es una de las cinco plantas de este tipo con la que cuenta la Dirección de Fabricaciones Militares, dependiente del Ministerio de Defensa de la Nación. Las otras se encuentran en Azul (Buenos Aires), Río Tercero y Villa María (Córdoba) y Jáchal (San Juan), inaugurada en agosto pasado por la presidenta Cristina Fernández y enfocada en la actividad minera.
En el caso de la fábrica de la vecina localidad, su tarea se enfoca en la producción de municiones de distintos calibres (9mm, 7.62mm, 32mm y 38 mm) para abastecimiento de las Fuerzas Armadas y policiales; también fabrica chalecos antibalas.
(El Ciudadano)