Dos muchachos fueron baleados mientras estaban en una fiesta en Villa G. Gálvez
Una discusión en medio de un baile terminó a los tiros. Un joven de 22 años fue internado en grave estado. Hay un joven de 18 años detenido, sospechoso de haber disparado.
Un baile que se realizaba el sábado a la noche en una casa de Villa Gobernador Gálvez terminó de manera violenta. Dos jóvenes fueron baleados cuando, según una fuente policial, un muchacho que estaba en la fiesta abrió fuego luego de mantener un entredicho con otro de los asistentes.
Poco después del violento episodio fue detenido un joven de 18 años bajo la sospecha de haber disparado los balazos. Y al cierre de esta edición uno de los heridos seguía internado en grave estado en el hospital Provincial.
Baile y tiros. El hecho se desató en una vivienda de Soldado Aguirre y San Lorenzo, en Villa Gobernador Gálvez, donde la dueña de casa había organizado un baile. El vocero consultado señaló que todo transcurría con tranquilidad hasta que un joven conocido como «Masita» protagonizó una discusión con un joven de 18 años identificado como Iván «Chucky» V.
«Después de este incidente Chucky se fue, pero al rato regresó con dos armas y amenazó a todos los que estaban en el baile mientras preguntaba por Masita. Entonces, las personas que estaban allí lo sacaron del lugar», explicó el portavoz policial.
En ese marco, al parecer el agresor decidió poner fin al pleito de la peor manera. Pulsó el gatillo de una de las armas y salieron disparados dos proyectiles que no hirieron a nadie. «En ese momento los asistentes a la fiesta se le fueron encima y entonces sacó el otro arma y volvió a disparar», comentó la fuente consultada. En este caso los balazos alcanzaron a dos muchachos que fueron trasladados al hospital Gamen de Villa Gobernador Gálvez.
Heridos. A Leandro Ramírez, de 21 años, un proyectil le rozó la frente. Pero la peor parte la llevó Walter Monzón, de 22 años. Un tiro le perforó el abdomen y debió ser derivado al Hospital Provincial de Rosario a raíz de la gravedad de la herida que presentaba. Luego del ataque, el agresor se subió a una moto bordó y se marchó.
La investigación del episodio quedó a cargo del fiscal Florentino Malaponte y de la subcomisaría 26ª. A las 7 de la mañana, tres horas después de la balacera, los efectivos de esa dependencia llegaron a la casa de los tíos de Chucky y lo detuvieron. Además recogieron dos vainas servidas calibre 32 que podrían ser de una de las armas utilizadas por el sospechoso para cometer el ataque.
Robo y detenidos. Sin embargo, todo no terminó con el arresto de Chucky, quien en ese lapso al parecer fue víctima del robo de una moto que había dejado estacionada en la puerta de su casa antes de marcharse al domicilio de sus tíos.
El muchacho apuntó contra un joven conocido como «Pucho», a quien fueron a buscar familiares y allegados suyos en un Chevrolet Corsa. Pero en el trayecto fueron interceptados por una patrulla de Gendarmería. «Detuvieron el vehículo porque les parecieron sospechosos los cuatro ocupantes del auto», explicó la fuente policial.
Lo concreto es que en el interior del Corsa los efectivos federales encontraron cuatro armas: una escopeta, un revólver calibre 32, un revólver calibre 22 y una pistola del mismo calibre. También incautaron una gran cantidad de cartuchos. «Se presume que algunas de esas armas las usó Chucky para cometer el ataque», dijo el portavoz consultado.
Quienes iban en el auto fueron arrestados acusados de tenencia de arma de guerra. Por su parte, Chucky también quedó detenido a la espera de la audiencia imputativa en Tribunales.
(La Capital)