Kicillof aseguró que los Holdouts buscar «atacar a la Argentina y a su moneda»

El ministro de Economía, Axel Kicillof, advirtió que existe “un plan de los fondos buitre” con el fin de “atacar a la Argentina y a su moneda”. Le pidió al Congreso tomar posición sobre el proyecto gubernamental respecto del pago local de la deuda con los bonistas, para no convertirse “en una escribanía” de Griesa.

En el marco de un plenario de comisiones en el Senado que se desarrolló este miércoles, el ministro calificó como “una extorsión imposible de aceptar” la resolución del juez estadounidense Thomas Griesa, redactada “por los fondos buitre”. También denunció que lo que se pretende “es impedir a la Argentina pagarle al 92,4 de los bonistas con un solo título”.

Kicillof cuestionó al magistrado que sostiene en su fallo que “se debe pagar el 100 por ciento de la deuda que se defaulteó en 2001″, y remarcó que si se paga tal cual pide Griesa “todos los demás tienen derecho a reclamar lo mismo”.

“Quieren hacernos negociar bajo extorsión, no servía pagar según lo que dijo Griesa, era ilegal e inequitativo, después de pagar eso venían otros y otros y otros”, alertó el funcionario, y aseguró que existe “un plan de los fondos buitre” para atacar al país y devaluar su moneda.

El titular del Palacio de Hacienda consideró que “el programa buitre es o nos pagan o hay default”, y los acusó de planear “atacar internacionalmente y por todos los medios” a nuestro país. “Éste es un asunto político y hay un plan de los buitres para la Argentina”, dijo y detalló que dentro de los objetivos de ese sector figuran “la devaluación, pegarle al país, no dejarle pagar en otro lado y no dejarle acceder al sistema financiero internacional”.

Kicillof ratificó que Argentina pagó 1.150 millones de dólares en julio y avisó que pagará a término el próximo vencimiento.

Sostuvo que el fallo del juez norteamericano “encadenó de manera absurda y sorprendente aquellos bonos defaulteados de 2001 a las reestructuraciones exitosas que realizó Argentina con una adhesión récord”, y reiteró que el país tiene que estar “orgulloso” en ese sentido.

Además, insistió con la necesidad de que el Parlamento se pronuncie sobre la decisión del gobierno argentino respecto del pago local de la deuda externa, y advirtió que si no lo hace corre del riesgo de convertirse “en una escribanía” del juez Griesa. “Si el Parlamento no hace nada, lo que hace es ratificar la orden y sentencia de Griesa y con todas las consecuencias que ello trae”, subrayó.

“Soberanamente no nos pueden impedir pagar. Queremos pagar y lo vamos a hacer, no lo podemos hacer en el banco de Nueva York, lo vamos a hacer acá”, dijo al reiterar que el próximo vencimiento de 200 millones de dólares va a ser pagado por Argentina.

El ministro precisó que existe “una coyuntura que no admite la abstención, que requiere una posición positiva y alternativa que le permita a Argentina seguir honrando sus compromisos externos ante la amenaza de Griesa de bloquear fondos de nuestra deuda, con el solo propósito que es que un uno por ciento reciba una ganancia usuraria”.

“Es una historia de usureros contra países soberanos”, manifestó el funcionario nacional y pidió no “aceptar pasivamente desde la crítica y complejidad que tiene la situación que Griesa se entrometa en otra jurisdicción para que se pague una ganancia de 1.600 por ciento a fondos buitre como Aurelio o Singer, cuya reputación es por todos conocida”.