Un enorme tornado deja al menos 51 muertos en los suburbios de Oklahoma
El tornado, de 1,6 kilómetros de ancho, dejó en ruinas vecindarios enteros y dio un golpe directo a una escuela primaria. Una portavoz oficial estimó que es previsible que el número de víctimas aumente.
Un monstruoso tornado de 1,6 kilómetros de ancho con vientos de hasta 320 kilómetros por hora cruzó los suburbios de Oklahoma City, dejando en ruinas vecindarios enteros y dando un golpe directo a una escuela primaria. Fueron confirmados 51 muertos.
La tormenta destruyó decenas de inmuebles en Moore, al sur de la ciudad. Calle tras calle de la comunidad estaba en ruinas, con montones de escombros acumulados donde antes había viviendas. Había automóviles y camiones abollados en el camino.
La oficina del médico legista de Oklahoma reportó que 37 personas murieron por el tornado, y horas después rectificó la cifra. La portavoz Amy Elliot dijo que es previsible que la cifra de víctimas aumente.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió un comunicado donde indicó que el tornado fue de categoría EF-4 en la escala Fujita, el segundo tipo de tornado más poderoso.
En un video de la tormenta se puede ver el oscuro embudo de nubes avanzando lentamente por el verde paisaje. Mientras el remolino recorre la comunidad, dispersa por todas las calles trozos de madera, material aislante, toldos, tejas y cristales.
Voluntarios y socorristas se apresuraron a peinar los escombros y fierros retorcidos en busca de sobrevivientes.
En la escuela primaria Plaza Towers, la tormenta arrancó el techo, derribó paredes y convirtió el jardín de juegos en una masa de plástico y metal retorcido.
Varios niños fueron rescatados con vida de entre los escombros.
James Rushing, quien vive frente a la escuela, escuchó las noticias de un tornado aproximándose y corrió al colegio, donde estaba su hijo de 5 años, Aiden. Rushing creyó que estaría más seguro ahí. “Unos dos minutos después llegué ahí y la escuela comenzó a desbaratarse”, relató. Los estudiantes se refugiaron en el cuarto de sanitarios.
Imágenes de televisión mostraron hogares y edificios reducidos a escombros en Moore. Las imágenes también mostraron vehículos bloqueando carreteras en el sur y suroeste de la capital del Estado.
El capitán de la policía de Oklahoma City, Dexter Nelson, indicó que el tendido eléctrico derribado y gasoductos abiertos representaban una amenaza tras el paso del tornado.
El mismo suburbio of Moore fue afectado por un violento tornado del 3 de mayo de 1999. Esa tormenta trajo consigo el viento más fuerte que se haya registrado en la superficie del planeta en toda la historia: 486 kilómetros por hora.
(La Capital)