El gobierno ofrece un blanqueo y bonos por dólares sin declarar
Anuncio del equipo económico en pleno. El plan será enviado al Congreso. Se conoció el mismo día que el dólar blue superó los 10 pesos. Juntarían u$s 8 mil millones.
El gobierno nacional anunció que enviará al Congreso un plan para permitir el blanqueo de activos en dólares no declarados fiscalmente. Para aprovecharlo, los infractores deberán dejar los billetes en el Banco Central, que a cambio les dará títulos con vencimiento en 2016, que pagarán un interés y podrán ser usados para invertir en el mercado inmobiliario o en el de infraestructura energética. Con esta medida, el fisco pretende captar parte de los 160 mil millones de dólares de argentinos que están fuera del circuito formal, dentro o fuera del país.
El anuncio se realizó el mismo día en el que el dólar «blue» superó los 10 pesos y en el que economistas de la oposición y referentes empresarios volvieron a presionar por una devaluación. El gobierno descartó un brusco movimiento del tipo de cambio pero les ofreció a los dolarmaníacos la posibilidad de blanquear sus tenencias ilegales a una nueva paridad, la que deriva del interés que pagarán los nuevos bonos.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner puso por primera vez a su equipo económico en pleno para explicar las medidas y, más novedoso todavía, contestar preguntas de la prensa. El ministro de Economía, Hernán Lorenzino, dio el título de la medida y aseguró que el gobierno se hizo eco de los «planteos del mercado». El viceministro Axel Kicillof explicó históricamente el impacto de las megadevaluaciones en el salario, el empleo y la inflación, y denunció que desde 2007 la economía argentina sufre «un ataque especulativo». La presidenta del Central resaltó la solvencia de la entidad monetaria, y el jefe de la Afip, Ricardo Echegaray, instó a los infractores a sumarse al blanqueo ofrecido porque «es una oportunidad para no desaprovechar».
Echegaray puso límites al blanqueo: ni el empresario Lázaro Baez ni el CEO de Clarín Héctor Magnetto. No fue sólo una respuesta técnica si no la forma de respuesta oficial al escándalo por presunto lavado de dinero. En ese punto, también dijo lo suyo el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien reparó las dudas que Lorenzino desnudó ante la TV griega para ratificar: «La inflación es la que dice el Indec».
Como en una obra, cada funcionario tuvo su propia letra en su debut ante las cámaras como un equipo. Allí explicaron que el gobierno enviará un proyecto de ley para crear dos nuevos bonos para el desarrollo económico y de infraestructura, y otro para el desarrollo del sector inmobiliario. «Este sistema de inversión está dirigido a quienes tienen ahorros en dólares sin declarar y los quieren resguardar en esos dos sectores», explicó Lorenzino.
Economía aclaró que la tasa de interés que pagará el Bono Argentino de Ahorro para el Desarrollo Económico (Bade) será del 4 por ciento anual, se abonará semestralmente y estará destinado a financiar inversiones en YPF y otros proyectos de infraestructura. Se podrá adquirir únicamente en dólares (sean o no declarados) por parte de familias o empresas a través de bancos o sociedades de Bolsa.
Por otra parte, el Banco Central creará Certificados de Depósitos Inmobiliarios (Cedin) emitidos en dólares y el interesado de los billetes los depositará en un banco a cuenta y orden de la autoridad monetaria, quien recibirá un certificado de tenencia. El tenedor podrá ejecutarlo para comprar una propiedad o desarrollar una inversión inmobiliaria y quien reciba el documento como pago, podrá ir al banco y cobrarlo en dólares.
El plan tiene como punto de partida una amnistía fiscal. Echegaray explicó que tanto particulares como empresas podrán blanquear fondos sin pagar impuestos, ni sufrir sanción administrativa o penal, que posean hasta el 30 de abril de este año.
La oferta a los infractores dolarizados da un paso atrás en la consigna de pesificar la economía y busca calmar la presión devaluatoria, cuya máxima expresión es la cotización del dólar ilegal. Desde la semana pasada la disputa se intensificó con la advertencia sobre el retraso cambiario por parte del economista del PRO Federico Sturzzeneger. Ayer, fue el saliente presidente de la UIA, José Ignacio De Mendiguren, quien pidió «reformular el modelo».
Los excluidos
El jefe de la Afip, Ricardo Echegaray, excluyó del blanqueo a quienes estén imputados en causas judiciales. “Lázaro Báez no puede participar pero tampoco puede hacerlo el señor Héctor Magnetto (Clarín)”, remarcó. Mencionó también a Leonardo Fariña, Molinos, el banco HSBC, Susana Giménez y el futbolista Jonathan Bottinelli.
(La Capital)