«Maravilla» Martínez reaccionó a tiempo y logró retener su título mundial
Las tarjetas dieron ganador al boxeador argentino por puntos, 115-112, y así sorteó con éxito la primera defensa del título de los medianos. El fallo fue polémico porque recién se impuso con claridad en los últimos dos rounds.
El quilmeño Sergio Maravilla Martínez retuvo el título mundial mediano CMB al imponerse por puntos en fallo unánime, pero localista, al inglés Martín Murray.
Al cabo de 12 rounds, en el Estadio José Amalfitani, en el barrio porteño de Liniers, los jurados coincideron al considerar en las tres tarjetas que el campeón ganó por 115-112.
Luego de un primer round de estudio entre ambos pugilistas, a partir del segundo el inglés comenzó a hacer daño con golpes cruzados con su mano derecha. Martínez, que se mostraba en inferiores condiciones físicas que su rival, optaba por moverse por todo el ring en busca de desestabilizar a Murray, muy pegado a su estrategia de no bajar nunca la guardia ni desordenarse en sus movimientos.
Recien en el cuarto round «Maravilla» marcó algo de la superioridad que se anunciaba en la previa con dos certeros cross de izquierda. Al inicio, del quinto, sin embargo, Murray volvió a ser efectivo con su derecha e hirió con una mano que dejó sentido al argentino.
En el siguiente asalto, aparecieron las secuelas físicas en el de Quilmes, quien apareció sangrando en su ceja izquierda. El inglés tomó nota de que era su momento y marcó su dominio sobre el argentino quien, atento a esa situación, comenzó a pedir el aliento del público.
Frío, el inglés se siguió moviendo sigiloso y aprovechó la ocasión: en el octavo conectó una derecha al mentón de Martínez y lo dejó en la lona (también lo haría en el 10° aunque con un golpe discutible desde lo lícito) y la tendencia era ya más que determinante a favor del visitante que en los dos siguientes rounds acorraló al argentino.
Éste, sin embargo, se había guardado lo mejor para el final: en el 11° y en el 12° round pudo conectar dos golpes que fueron determinantes para que el fallo, por cierto discutible, lo diera ganador por tres puntos, ante el desconcierto de la esquina del inglés que confiaba en un resultado positivo.
Apenas finalizada la pelea, «Maravilla» saltó a las cuerdas del ring para pedir el aliento de público, seguro de que el factor de la localía sería fundamental. Con polémica o no, Sergio Martínez ya cuenta en su haber con una defensa exitosa del título mundial de los medianos del CMB pese a que su noche lejos estuvo de ser la del gran campeón.
(Infobae)