La estrategia del silbato para combatir la inseguridad
Es rosarino y cansado por los continuos hechos de violencia, propone un novedoso sistema de seguridad: pretende emplear a más de 2000 ciudadanos que sólo estarían provistos por un silbato. Dice que intentó hablar con Mónica Fein y Jorge Boasso, pero no tuvo éxito; solicita ser escuchado.
Germán es un vecino del microcentro, desde hace varios meses ya cuenta con, según él, “la solución para terminar con la inseguridad en las calles de Rosario”. En su cabeza, proyecta un mecanismo en el que, sólo en el Distrito Centro, se emplearían a 2334 ciudadanos en turnos de 12 horas y provistos apenas con un silbato. El alerta se activaría ante la presencia de algún hecho delictivo simplemente haciendo uso del elemento: “Si el arrebatador empieza a correr, con el silbato se estaría alertando a la persona de la otra cuadra; al haber uno cada 100 metros, no tendría escapatoria”.
Germán explica que no es necesario proveer ni de armas ni de ningún elemento de violencia a este personal de vigilancia ya que no estarían encargados de detener a nadie: “Para eso está la policía, el de seguridad nada más tiene que silbar”, indica.
La sustentabilidad económica también está ideada ya que los vecinos percibirían en el impuesto municipal un incremento de $25; el proyecto parece ambicioso y Germán está entusiasmado con que algún político lo escuche: “Se termina con pibes chorros, arrebatos, motochorros, carteristas, estafadores, escruches; no hay que poner ni mano dura, ni más policías ni tampoco hay que salir a matarlos a todos. Mi plan es simple y claro”.
Más allá de que en México, Bolivia y Perú intentaron implementar un sistema similar, aquí habrá que esperar si suena el teléfono de Germán, que los días corran, ver si alguien tiene ganas de escucharlo y perfeccionar su idea para ponerla en práctica. El debate está abierto.
(Notiexpress)
