Cambios en la Policía: los ascensos serán por méritos
La provincia puso en marcha un sistema de concursos dentro de la fuerza. Se deroga un régimen donde los mismos efectivos disponían las promociones. «Es un mecanismo mucho más transparente que evita el reciclaje de funcionarios”, dijo Bonfatti.
El gobierno provincial puso en marcha formalmente este miércoles un sistema de ascensos por concurso dentro de la Policía, por lo que, de aquí en más, el progreso de cada efectivo dentro de la fuerza quedará supeditado a los méritos que haga en su trabajo.
El gobernador Antonio Bonfatti firmó el decreto que establece el nuevo mecanismo, que deroga al Régimen de Promociones Policiales de 1992, basado en juntas de calificaciones integradas exclusivamente por personal policial.
“Me parece sumamente importante que no haya más juntas de calificaciones donde los mismos policías disponían los ascensos, sino concursos en los que intervienen jurados integrados por representantes de los ministerios de Seguridad, Justicia, Educación, la Corte”, destacó el mandatario luego de la rúbrica.
Bonfatti explicó que “también habrá dos representantes de los policías, uno de ellos elegido por sus pares y el otro designado por el jefe de Policía de la provincia». «Es decir, vamos hacia a un mecanismo mucho más transparente donde hay un reconocimiento al mérito; no un reciclaje del funcionario policial”, señaló.
El nuevo sistema busca garantizar el principio constitucional de idoneidad y el mérito como fundamento para los ascensos. El objetivo es jerarquizar al personal policial, valorando los esfuerzos en la capacitación y profesionalización dentro de las fuerzas para lograr mejores condiciones de mérito.
A la vez, la provincia promete que los concursos dotarán de mayor transparencia a los ascensos en la medida que los jurados estarán integrados, además, por miembros externos a la institución policial, mientras que su composición apunta a contar con una mirada interdisciplinaria.
Los jurados estarán conformados por un representante de cada uno de los ministerios de Seguridad, Educación, Justicia y Derechos Humanos, además de la Corte Suprema de Justicia y un funcionario policial de dirección de jerarquía superior a la del postulante a propuesta del jefe de Policía y un representante del personal policial en actividad elegido entre sus pares.
En ese sentido, están previstas conformaciones diferentes para los jurados según se realicen concursos para rangos superiores, intermedios e iniciales.
En tanto, el Poder Ejecutivo establecerá el número de vacantes por grado a cubrir, mientras que Seguridad será la cartera encargada de dictar anualmente una o más resoluciones llamando a los concursos de antecedentes y oposición para cubrir las vacantes.
Las etapas del proceso de selección
-Evaluación de antecedentes
-Examen de oposición
Será requisito aprobar la primera de las instancias para pasar a la segunda, y podrá participar personal:
-de la jerarquía inmediata anterior a la que se concursa;
-que acredite el cumplimiento del requisito de tiempo mínimo cumplido previsto en el anexo II de la ley del personal policial;
-que acredite haber cumplimentado satisfactoriamente con los exámenes de aptitud psicofísica, habilitantes para participar en el concurso;
-que no esté alcanzado por las causales de inhabilitación previstas en la ley del personal policial.
Descentralización de trámites no penales
Bonfatti también firmó este miércoles el decreto que autoriza a los municipios y comunas de la provincia, a los centros cívicos de las cinco regiones provinciales (dependientes del Ministerio de Gobierno), a los registros civiles (Justicia y Derechos Humanos) y a los juzgados comunitarios de las Pequeñas Causas (Registro Civil), a expedir el certificado de declaración de domicilio –conocido como “certificado de vecindad”– y el certificado de supervivencia.
El propio gobernador anunció que “a partir de abril estos certificados que la población necesita de manera frecuente no se realizarán más en comisarías”. De esta manera, destacó, se cumple “con otro punto de la ley de emergencia en seguridad, que apunta a liberar a los agentes de la Policía de tareas administrativas para que puedan dedicarse a lo que más nos importa, que son las tareas de prevención y persecución del delito”. (Rosario3)