Una racha que no se detiene: Central sufrió, pero ganó y amplió su ventaja
Con goles de Lagos y Bareiro, uno en cada tiempo, el equipo de Russo obtuvo una distancia que fue decisiva, más allá del descuento de Gómez que lo tuvo incómodo hasta el cierre. Logró su 12º éxito seguido y le sacó cuatro a los escoltas, entre ellos Olimpo, su próximo rival.
Central dio otro paso firme hacia su único objetivo. En cancha de San Lorenzo, sufrió más de la cuenta, pero finalmente consiguió su esperada victoria por 2 a 1 sobre Nueva Chicago, en la fecha 24 de la B Nacional. Fue la 12º consecutiva, con la que le sacó cuatro puntos de diferencia a Gimnasia y Olimpo.
El Canalla arrancó con todo y rápidamente consiguió una ventaja que le permitió afrontar el trámite con mayor tranquilidad que de costumbre. Tras un córner de Carrizo, el equipo de Russo cumplió con la vieja premisa de que “dos cabezazos en el área es gol”. Valentini conectó el primero y Lagos, con Monllor encima, definió con el segundo para poner el 1 a 0 parcial con apenas cuatro minutos de juego.
El Torito, que llegó último en la tabla del promedio y de las posiciones y con René Kloker como DT interino por la salida de Bernuncio, tuvo el empate poco después en el pie de Matías Escudero, que abajo del arco le pegó mordido y mandó la pelota por arriba del travesaño.
Pero Central, durante los primeros 40 minutos del primer tiempo, fue muy superior y generó varias situaciones de gol. No hubo equivalencias en un desarrollo en el que siempre hubo espacios, sobre todo por los costados. Con Delgado por izquierda y Ferrari y Carrizo por derecha, el Canalla abasteció permanentemente a Toledo y Bareiro.
De hecho, si el primero hubiese estado menos errático, el puntero podría haber goleado. A los 23´, pifió con su derecha un centro que Carrizo dejó abajo del arco, y a los 35´ tuvo un cabezazo en el área chica que derrochó por sobre el travesaño. Entre tanto, Bareiro se lució con una palomita que pasó a centímetros del palo de Monllor.
En el juego, la distancia era enorme, pero el marcador escueto. Y en el cierre de la etapa inicial, el Canalla pasó más de un sobresalto. De hecho, Caranta se lució en su única intervención al tapar un tiro de Peyran que podría haber sido una injusta igualdad, pero aseguró el éxito parcial.
Central salió al segundo tiempo con el desafío de no relajarse, en este compromiso que lo tenía como el puntero absoluto ante el último. Y para su propia tranquilidad, volvió a golpear en menos de diez minutos.
Con 7´ jugados, Bareiro —habilitado por Farías— quedó solo frente a Monllor y no decepcionó. La paró de pecho y definió por encima ante la salida del arquero verdinegro. Con esa exquisitez, el paraguayo sentenció el 2 a 0 mientras marcó su primer tanto con la camiseta auriazul.
Pero después, el Canalla perdió la pelota por más de 20 minutos y el Torito lo fue acorralando. Tanto, que lo hizo sufrir hasta el epílogo. Y aún sin ideas claras pero con insistencia, halló el descuento que sembró la incertidumbre luego de que Christian Gómez aprovechara una pelota que quedó picando en el área.
Ni siquiera Toledo, que desperdició dos ocasiones más y redondeó una floja actuación, pudo darle más aire sobre el cierre. Entonces, por más que había sido ampliamente superior, Central tuvo que esperar hasta el pitazo final de Castro para poder desahogarse.
Pero valió la pena: los 6.500 hinchas canallas que llegaron este lunes hasta el Bajo Flores y los tantos otros que lo siguieron desde Rosario, celebraron la 12º victoria consecutiva. Más bien, gritaron por esa racha que no se detiene y que parece encaminarlo hacia su gran deber. Por lo pronto sufrió, pero ganó 2 a 1 y espera por Olimpo, uno de sus perseguidores. (Rosario3)