El doble discurso del Frente Progresista
Depende de que lado del mostrador se encuentre, el Frente Amplio Progresista (FAP), adopta diferentes posturas con respecto a la realidad social del país, la provincia y el municipio. Esta «virtud», no es exclusiva de los integrantes de esta fuerza política es cierto, pero en todo caso, que sean ellos los encargados de mostrar las ajenas.
La frutilla del postre, fue la aceptación por parte de la secretaria de Hacienda de la Municipalidad de Rosario, Verónica Irizar, acerca de que presurosamente estaban elaborando carpetas para solicitar fondos a la Nación, haciendo uso de la nueva herramienta de financiamiento directo implementada por el gobierno nacional.
Pero apenas unos días antes, el vicegobernador de la provincia, Jorge Henn, a cargo del Ejecutivo provincial, por el viaje de Bonfatti a las paradisíacas playas del Caribe cubano, dijo que la flamante normativa era «prevendaria, distorsiva y que premiaba a los amigos y castigaba a los que pensaban distinto».
También en la semana, una desconocida Fein, superada por las circunstancias, convocaba a todos los bloques políticos del Concejo Municipal, para intentar involucrarlos en la lucha contra el narcotráfico y la inseguridad, mientras Binner y Bonfatti, en Buenos Aires y ante medios amigos, denunciaban una «embestida política» para perjudicar a Santa Fe.
Pero también el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (IPEC) se sumó al descalabro comunicacional, cuando anunció que la inflación del 2012, no había superado el 18%, al tiempo que desde el gobierno provincial se disponía el llamado a paritarias para docentes y estatales. Sin embargo Binner en la Nación, en cada discurso habla de cifras muy superiores, cercanas al 30%.
Es como cuando desde el socialismo y el radicalismo se apoyaba la lucha del campo, se acudía a las manifestaciones, se sumaba militancia a las protestas, pero al poco tiempo de terminado el conflicto y caída la 125, hacían fila para cobrar las regalías del Fondo Sojero. Rosario y Santa Fe, gobernadas por socialistas y radicales cobran jugosos dividendos del «yuyo» maldito.
Nadie olvidará el spot publicitario de campaña de Hermes Binner, cuando mostraba un teléfono sonando sin cesar y una vela encendida a su lado, y él con cara de bueno decía que cuando gobernara Santa Fe todo sería distinto, sin embargo hoy todo es igual, o peor.
Siempre se dijo que es más fácil ser oposición que gobernar. Basta con señalar con el dedo aquello que se hace mal, sin que ni siquiera haga falta decir como se lo haría distinto. Cuando se comparten responsabilidades de gobierno, y se es oficialismo en algunas partes y oposición en otras, es más difícil…