Oficialismo y oposición repudiaron la denuncia de Clarín a periodistas
La demanda penal del multimedio generó un amplio rechazo en la política y también en la prensa. Rossi dijo que al holding no le interesa la libertad de expresión. Donda habló de «mala señal».
Dirigentes políticos del oficialismo y de la oposición, al igual que trabajadores de prensa, incluso algunos hipercríticos del kirchnerismo, salieron ayer a repudiar la demanda penal que presentó el Grupo Clarín contra periodistas, a quienes acusó de incitar a la violencia contra el multimedio y sus directivos.
Desde la vereda de la oposición, la diputada del FAP Victoria Donda dijo ayer que le parece «muy mala señal» para la sociedad tanto «la agresividad» del gobierno hacia el Grupo Clarín, como que éste intente «judicializar» una «simple discusión o posición política» de periodistas.
«Me parece muy mala señal para el conjunto de nuestra sociedad tanto la agresividad del gobierno nacional para el grupo Clarín y algunos periodistas, como intentar judicializar, como está haciendo Clarín con esta demanda, una simple discusión o posición política de quien sea, tanto de periodistas, funcionarios o cualquier ciudadano», señaló Donda.
Por su parte, el ex diputado y dirigente radical Leopoldo Moreau calificó como «un retroceso democrático» la denuncia penal presentada por Clarín «por incitación a la violencia y acción agravada» contra periodistas, agrupaciones sociales y funcionarios, por haber criticado a ese grupo que se opone a adecuarse a la ley de medios.
«La denuncia del Grupo Clarín pidiendo cárcel para periodistas es un pésimo precedente para sus propios periodistas. Un retroceso democrático», afirmó el dirigente radical.
Desde el sector sindical crítico al gobierno, con la CGT que conduce Hugo Moyano, también salieron a cuestionar la acción legal contra periodistas. El secretario general del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas, Omar Plaini, expresó su «solidaridad» con los periodistas denunciados por el grupo Clarín y lo consideró «otro atropello de la empresa a los que estamos acostumbrados».
Para el líder gremial de los canillitas, el multimedio «trata de imponerse» y dijo que «más allá de las opiniones de los periodistas, estamos en un Estado democrático, tenemos el derecho cada uno de los ciudadanos a expresarnos». «Esperemos que la Justicia actúe rápidamente y no permita que esto avance. Desde ya, mi solidaridad con los periodistas», recalcó.
La denuncia presentada por los abogados del multimedios acusa del delito de incitar a la violencia colectiva a los periodistas Sandra Russo, columnista de Página/12 y panelista del programa 6,7,8, así como también al relator de Fútbol para Todos Javier Vicente, al fundador de Tiempo Argentino, Roberto Caballero, a Nora Veiras, Edgardo Mocca y Orlando Barone.
Frente a la ola de repudio, los abogados de Clarín, Hugo Wortaman Josfré y Alejandro Pérez Chada, aseguraron que en la denuncia no se pide la imputación de los periodistas, sino como testigos en la causa.
Pese a esta rectificación por parte de Clarín, el Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) realizó ayer una conferencia de prensa en la que acusó al holding de mentir y anunció que asumirá la defensa de los periodistas imputados (ver aparte).
En tanto, el kirchnerismo continuó haciendo sentir su repudio a la «denuncia» contra periodistas, a la que calificó de «intempestiva» y «autoritaria».
En ese marco, el presidente del bloque de diputados del FpV, Agustín Rossi, consideró que la denuncia responde a que el holding mediático «está dispuesto a cualquier cosa para defender sus intereses» y que con esto demuestra que «no le interesa en absoluto la libertad de prensa y expresión».
El vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, señaló que se trata de «una acción intempestiva y fuera de este tiempo» que «transgrede los dictámenes internacionales de libertad de expresión».
A su turno, el senador Aníbal Fernández catalogó la postura de Clarín de «prepotente y pendenciera, ya que siempre sacó ventajas de la relación con los distintos gobiernos».
SPR Rosario
El Sindicato de Prensa de Rosario se solidarizó con los periodistas denunciados. “La actitud de Clarín es un verdadero ataque a la libertad de expresión que siempre invoca, puesto que pretende la condena penal de quienes manifiestan una mirada y opinión distinta a la que se sostiene en los medios que integran el monopolio”, dice el SPR.
(La Capital)