Asaltaron a la concejala María Eugenia Schmuck y desvalijaron su casa
La concejala radical María Eugenia Schmuck fue asaltada anoche a mano armada por un grupo de delincuentes que desvalijaron su casa y también se llevaron su auto. Llegaba con su familia a su domicilio, la esperaban en la puerta y mientras les apuntaron con pistolas durante más de media hora, vaciaron la vivienda. Contó que rápidamente realizó la denuncia en la comisaría 17º pero hasta esta mañana no habían acudido a evaluar el robo y no había novedades del vehículo. La primera revelación pública del asalto la realizó a través de su cuenta de Twitter.
La edila llegaba pasada la medianoche con su marido Franco Bartolacci, su hija de cinco meses y su hijo de nueve años a su casa de Fisherton cuando volvían de cenar de la casa de unos amigos. «A punta de pistola nos hicieron entrar en casa, junto con los chicos nos encerraron en nuestro dormitorio. A mi me pidieron que me de vuelta, que no los mirara, me dejaron quedarme sentada con la beba en brazos y el nene que en un momento se puso nervioso. A mi marido si lo tenían en el piso, reducido»; contó al programa «La que se viene» de La Ocho.
«Se llevaron todo lo que compramos con años de trabajo, somos dos laburantes que la remamos y lo que tenemos es fruto de nuestro trabajo. Igual no es tan groso eso como la cara de mi hijo cuando se dio cuenta de lo que estaba pasando», dijo y señaló que se robaron desde el auto hasta el cochecito.
Schmuck compungida por lo sucedido lamentó que su pequeño hijo haya tenido que transitar por la violenta situación. «Al principio le dije que eran unos amigos porque lo quería proteger. Pero cuando sacaron las pistolas él se dio cuenta de todo, es una situación de mucha vulnerabilidad y lo primero que pensás es en tus hijos, que no les pase nada», dijo.
En tanto estimó que cree que los «marcaron» porque «los estaban esperando». «Sabían que nos habíamos ido y que el auto no estaba en la puerta, estaban organizados y no sé si además de llevarse las cosas en nuestro auto no tenían otro vehículo», dijo y contó que el asalto duró media hora aunque a ellos les pareció «eterno».
«No estamos excentos a la inseguridad. Tengo la sensaciçon de estar sometida a la misma situación por la que atraviesan otros vecinos de la ciudad. Es el tercer robo que sufro a mano armada, antes me sucedieron cuando vivía en zona sur pero no tenía hijos», contó.
Respecto a la atención policial señaló que desde «el Comando llegaron rapidísimo, enseguida entendieron, pero de la comisaría no vino nadie, nos dijeron que nos iban a llamar, queríamos cierta celeridad por el tema del auto», reveló y dijo que no «hizo ínfulas» de su condición de concejal para acelerar los tiempos. «Igual cuando me preguntaron la profesión lo dije. Pero no importó mucho porque no vinieron», contó y cuando la entrevista radial culminaba su marido le avisó que acababa de arribar el comisario a su domicilio.
«Escucho a los vecinos que todo el tiempo cuentan esto», y aclaró que no se irá del barrio aunque se replantea algunas condiciones de seguridad. «Claro que tengo miedo y seguro que voy a entrar a mi casa por mucho tiempo con miedo, pero no me paraliza».
Y aseguró: «Me dan ganas de seguir trabajando para cambiar las cosas por más que no sea nuestra competencia quiero trabajar para que podamos vivir más seguros». (La Capital)