La Municipalidad clausuró el picódromo ilegal donde murió un joven
Tal como se especulaba, en la tarde de ayer fue clausurado el picódromo de Ovidio Lagos al 6.800, donde el último sábado falleció un joven oriundo de Pérez en un accidente. Personal de la Guardia Urbana Municipal (GUM) colocaron la fanja de cierre preventivo, debido a la falta de habilitación y medidas de seguridad.
El procedimiento lo realizaron agentes municipales con apoyo de casi una docena de efectivos policiales, ante la atenta mirada del propietario del predio, Marcos Espósito, quien el miércoles intimidó a dos periodistas de La Capital que se llegaron hasta el predio para tener más detalles del deseso de Maximiliano Primucci (29 años), que falleció el último sábado en un accidente.
Según informó el respeonsable del operativo, Maximiliano Gómez, «la municipalidad procedió a una clausura preventiva», por orden de la secretaría de Gobierno local y como consecuencia de la muerte del joven.
Consultado sobre los motivos de la clausura comentó que fueron la falta de habilitación, además de “pequeñas fallas” como «baños sin terminar, fallas en el tendido eléctrico y situaciones de precariedad» en el predio.
El funcionario municipal destacó que no hubo resistencia de parte de los representantes del predio y que desde el municipio estaban al tanto de que para esta noche estaba polanificada otra jornada de picadas, una información que la misma gente del picódromo promocionaba en su sitio de Facebook.
“Hemos sido atendido por el propietario Espósito y su hijo. Fue un procedimiento limpio y sin complicaciones”, relató.
El funcionario descartó también que el hecho de que al ser clausurado este lugar, las picadas se trasladen a otros puntos de la ciudad, y dijo que desde que comenzó el verano se intensificaron para evitar esto.
“El objetivo de desalentar las picadas clandestinas, sobre todo en la zona de la costanera”, señaló.
Hablando de Espósito, estuvo reunido este mediodía en la Municipalidad con la Directora de Habilitaciones, Marianela Mosconi, para interiorizarse de los requisitos y documentación para conseguir la habilitación correspondiente, como también para conocer las obras que deberían hacer en materia de seguridad. Por lo pronto, los propietarios del predio se comprometieron a no realizar carreras hasta tanto el predio no esté debidamente habilitado. (La Capital)