El «Negro» Fontanarrosa tendrá una plaza en su memoria en Rosario
El proyecto “Ciudad Joven”, que comprende la remodelación y puesta en uso de los antiguos cuatro galpones portuarios ubicados sobre el río Paraná desde la bajada Sargento Cabral hasta la Fluvial (y a la altura del Monumento Nacional a la Bandera) comienza a tomar forma. La firma que se adjudicó la obra, Epreco SRL, puso en marcha los trabajos, que demandarán una inversión de casi 33 millones de pesos, a finales del mes pasado. Pero lo novedoso, hecho que había pasado prácticamente desapercibido para la mayoría, es que en el lugar se montará una plaza en homenaje a Roberto Fontanarrosa: la idea es crear un parque temático con los personajes más reconocidos del artista a gran escala y al aire libre, delante de los galpones. Allí estarán, entre muchos otros protagonistas de sus geniales creaciones, el gaucho Inodoro Pereyra y su célebre compañero Mendieta, aquel lobizón al que le agarró un eclipse de Luna y quedó perro que habla.
La obra involucra a los galpones 11, 13, 15 y 17, que suman una superficie de 12 mil metros cuadrados. A través del emprendimiento, el gobierno de la provincia busca consolidar el corredor ribereño de perfil “recreativo”, “turístico” y “productivo” y la recuperación del espacio público con fines culturales. A fines de octubre los trabajos ya habían comenzado: se cercó todo el lugar y por estas horas ya se están removiendo suelos y baldosas.
Según explicaron desde la Gobernación, se trabajará en la recuperación y puesta en valor de los terrenos circundantes, recorridos, calles y paseos. Eso implicará la colocación de barandas sobre el río, parquización, alumbrado público, reacomodamiento de adoquines, tendidos de infraestructura y servicios, entre otros trabajos. En cuanto a lo edilicio de los galpones, las tareas a ejecutar serán el reacondicionamiento de la estructura, trabajos de pintura, colocación y reparación de aberturas.
Cada uno de los galpones tendrá una impronta cultural diferente. El Galpón 11 contará en su planta baja con un Centro de Culturas Urbanas, escuela de rock y música, auditorio, escuela de artes urbanas, actividades públicas y barriales. En el subsuelo habrá una Usina Digital, espacio incubador de emprendimientos vinculados al uso de las nuevas tecnologías. También tendrá sala multiuso para reuniones y clases.
El Galpón 13, en tanto, tendrá en planta baja una fábrica cultural; y un espacio para la comercialización de objetos de diseño. En el subsuelo, al mismo tiempo, habrá cooperativas de trabajo. También se emplazará una plaza joven para actividades deportivas y artísticas al aire libre que incluirá: skate park, escenario, puesto de comidas rápidas, y paredones para desarrollar graffiti y el urban art.
En el Galpón 15 habrá un bar sobre la “Plaza Mayor”, por fuera de la primera nave y en la segunda, habrá un Centro de eventos culturales. Asimismo, en el Galpón 17 habrá un restobar temático y un espacio para la distribución de bienes culturales reproducibles.
Otro “renegau”
Lo cierto es que a lo largo del año pasado, y casi en silencio, se decidió incluir en los pliegos licitatorios dentro del proyecto un paseo en honor a Fontanarrosa, el cual contará con una serie de esculturas con sus personajes más representativos. La idea original de la iniciativa surgió de un arquitecto local, Rubén Fernandez, amigo personal del “Negro”, quien le contó a El Ciudadano la historia de la iniciativa.
El profesional relató que le confió el proyecto al propio Fontanarrosa antes de que muriera. “La idea surge fundamentalmente en la inauguración de una estatua de Clemente en una plaza de Adrogué, que tuvo como invitado al propio Caloi. En principio me pareció algo muy gracioso, pero inmediatamente me hizo pensar que Rosario podía llegar a tener, en algún lugar de la ciudad, una expresión escultórica plástica de las figuras y personajes que el Negro recreó en historietas. Le comenté esta idea a él, que aún estaba vivo, y le gustó”, confió Fernandez. El amigo del genial autor agregó que en ese momento tomó como referencia un parque que estaba próximo al río, cerca de su estudio y de la casa de Fontanarrosa. “Como él se encontraba en silla de ruedas, podía salir al balcón y ver los objetos que estaban frente a su departamento”, pensó en aquel entonces.
Según explicó Fernández –y así se puede ver en la foto “maquetada”– lo diseñado es una especie de recorrido en el cual aparecen Inodoro Pereyra y Mendieta en un ambiente bien “autóctono”, abajo de un añoso ceibo. Cerca de ellos está la Eulogia, siempre presente, y en el fondo, en su propia aventura, Boogie El Aceitoso, quien está más cerca de los galpones y en un entorno más urbano, acorde con su violenta profesión.
Luego de realizado el proyecto, escultores y artistas plásticos serán quienes hagan su aporte en la materialización de objetos. “Estipulamos que estas figuras deberán sobrepasar la altura humana promedio. Tendrán que medir alrededor de 2,20 metros, de manera que se puedan ver a la distancia. Aparte, deberán tener un efecto nocturno a partir de un proyecto de iluminación que permita apoyar a estas volumetrías”, describió el arquitecto, a quien la lamentada muerte de su amigo no lo hizo cejar en su decisión. (El Ciudadano)
Cómo será la plaza (maqueta virtual)