¿Quién es el médico que operará a Cristina?
Pedro Saco es director del Departamento de Cirugía y jefe de la sección Cabeza y Cuello del Hospital Austral; dirige el mismo servicio en el Instituto Roffo.
La operación a la que la presidenta Cristina Kirchner será hoy mañana para extirparle el cáncer de tiroides que se le detectó la semana última estará a cargo de Pedro Antonio Saco, un prestigioso médico santafecino, director asociado del Departamento de Cirugía y jefe de la sección Cabeza y Cuello del Hospital Universitario Austral, donde se realizará la intervención.
Saco, de 64 años, dirige además, el mismo servicio en el Instituto de Oncología Angel H. Roffo, uno de los hospitales de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
«Es un honor atender a la Presidenta», dijo Saco en una breve entrevista con el diario Crónica publicada el viernes último. Aseguró además que operará a Cristina Kirchner «con la profesionalidad de siempre» y, pese a reconocer que estuvo con ella en los últimos días, no quiso dar detalles de la conversación. «Sean respetuosos de la intimidad de los médicos y sus pacientes», pidió.
Saco, que operará a la jefa del Estado de un carcinoma papilar en el lóbulo derecho de la glándula tiroides estudió medicina en la Universidad Católica de Córdoba, donde se graduó en 1984, y desarrolló luego su carrera en Buenos Aires. Es considerado uno de los más reconocidos especialistas en garganta, cuello y oído.
Tras graduarse de médico, completó su residencia en el hospital Ramos Mejía y se especializó en cirugía oncológica de cabeza y cuello en el Instituto Roffo. Hizo capacitaciones en instituciones dedicadas al tratamiento de cáncer en Houston y en Nueva York. Lleva 27 años en el ejercicio de la profesión y es vicepresidente de la Asociación Argentina de Cirugía de Cabeza y Cuello.
En las últimas horas trascendió que Máximo Kirchner, el hijo mayor de la Presidenta, fue quien más inquieto se mostró ante el cuerpo de médicos que encabeza Saco respecto del estado de salud de su madre y de los detalles de la operación. Dicen que el joven tuvo extensas y pormenorizadas conversaciones con el cirujano. (La Nación)