Barletta quiere convocar a Carrio y López Murphy para que vuelvan al radicalismo
El nuevo presidente del centenario partido aseguró que piensa en convocar a «todos los radicales», incluso a los que se fueron. Mencionó a la ex candidata a Presidente y también a Ricardo López Murphy. «Los radicales tenemos que volver a enamorar», sostuvo el santafesino.
Es el hombre del consenso. Después de casi dos meses de tensiones, de idas y vueltas, y de un sinnúmero de nombres que se candidatearon para estar al frente de la Unión Cívica Radical, el santafesino Mario Barletta asumió el desafío, y aceptó la propuesta que le hizola Convención Nacional partidaria realizada el viernes.
Y como primer paso, Barletta envía un mensaje de unidad, que incluye la vuelta de varios dirigentes que, en algún momento, decidieron alejarse de la estructura partidaria. Como por ejemplo, Elisa Carrió.
«Es mi prima, hasta me llamó para felicitarme. La primera etapa del radicalismo que viene tiene que ser para fortalecer a la gente que lo compone y luego sí hay que entablar diálogo con otras fuerzas. No hay que pedir más pasos al costado, sino pasos adelante», señaló el ex intendente de Santa Fe durante una entrevista con un matutino porteño.
Otro de los nombres que aparecen en el horizonte del nuevo presidente radical es el de Ricardo López Murphy, ministro durante el gobierno de la Alianza.
«No decido solo, pero a título personal me gustaría que vuelvan todos. Si me llama López Murphy para hablar, ¿cómo no lo voy a recibir? Convocaría a todos», aseguró.
Pero no sólo de futuro habla Barletta. También hace una fuerte autocrítica del andar del radicalismo en los últimos 20 años.
«Desde el final del mandato de Raúl Alfonsín, el radicalismo empieza a decepcionar por no estar a la altura de las circunstancias. Se necesita una reacción muy importante para que sea un partido moderno y profesionalizado. Estamos pasando un buen momento pero no estamos pensando en una estrategia a futuro. El radicalismo tiene que volver a enamorar», sostuvo.
En ese sentido, destacó que la nueva conducción nacional está integrada por «una fuerte representación de las diferentes provincias, un fuerte poder de la mujer y de la juventud radical».
«Es un buen comienzo también porque vuelve el radicalismo a demostrar que es el único partido que tiene una práctica democrática hacia el interior de su partido. Lo que quedó demostrado es que hay que consolidarlo. Necesitamos de todos los radicales, y estar trabajando juntos porque la tarea es difícil», explicó.
De todas formas, admitió que en el seno de la UCR «siempre va a haber diferencias» y pidió «tratarlas para que nos ayuden a mejorar y a crecer». (Infobae)