El norte provincial, conmovido por la muerte y violación de una nena
«Fue muy cruel. Nunca antes había ocurrido nada así», admitió el intendente de Guadalupe Norte, donde se registró el aberrante hecho. El juez a cargo del caso admitió que las pruebas apuntan al padrastro de la menor, detenido en Reconquista, quien se habría incluso incriminado ante la madre de la chiquita al decirle: «Me parece que me pasé con tu hija».
El norte santafesino aún está conmocionado por la aberrante muerte y violación de una nena de tres años ocurrida este fin de semana. Por el caso se encuentra detenido el padrastro de la menor, quien se habría incriminado ante la madre de la chiquita. El hombre, quien no tiene antecedentes, debe prestar declaración este martes pero habría varias pruebas en su contra.
El intendente de Guadalupe Norte, Héctor Zat, aseguró en diálogo con Radio 2 que la localidad se encuentra «muy conmocionada» por lo ocurrido. «Es un caso que sorprendió a todo el pueblo y lo conmovió. No hay palabras ni explicaciones, nadie entiende. Lo que hizo esta persona fue muy cruel», planteó.
Zat contó que Guadalupe Norte es «una comunidad muy pequeña, de 1500 habitantes», la definió como «una comunidad pacífica» donde «nunca pasó nada» y «todos los vecinos se conocen».
Contó que la familia afectada por la tragedia era gente que no hacía mucho se había instalado en el pueblo. «Hace poco que estaban en Guadalupe. La mamá del muchacho que cometió aparentemente el crimen se había juntado con un señor en Guadalupe hace unos tres años, estaban en concubinato. Pero esta señora era de Villa Ocampo, ciudad ubicada unos 60 kilómetros al norte», detalló. Al parecer, esa mujer se había instalado en Guadalupe por problemas familiares. Y el joven señalado como responsable del crimen, junto a su pareja y la hija de esta (la chiquita fallecida), habían llegado desde Buenos Aires hace poco tiempo. «Esta persona era el padrastro (de la nena), no vivía en Guadalupe, vino a hacer unas changas y estaba en la casa de la madre, no estaba instalado definitivamente en este pueblo», aclaró.
Zat señaló que no llegó a conocer personalmente a ningún integrante de la familia, pero «por comentarios en la comunidad» se enteró de que el hombre era «muy agresivo» y que «no quería a la nena, la maltrataba, le pegaba delante de la gente».
El intendente de Guadalupe Norte destacó el accionar policial. «Cuando ocurrió este caso, el muchacho desapareció, se fue a un monte. Pero en una hora y algo la policía lo capturó y lo trasladó rápidamente a 25 kilómetros, a Reconquista. Esto evitó, además, una pueblada.
En tanto, el juez de instrucción de Reconquista Virgilio Palud, a cargo del caso, confirmó que «hay indicios» que apuntan a que el padrastro de la menor podría ser el autor del hecho. Entre los elementos más fuertes está «la referencia que él mismo le hace a la madre de la chica», cuando el hecho aún se conocía. Le habría dicho una frase del estilo «Me parece que me pasé con tu hija», según contó el magistrado. Y por esta razón «la madre acude rápido al domicilio y encuentra a la beba tirada en la cama», detalló. Además, «posteriormente se dio a la fuga», recordó.
«Lo fundamental serán las pruebsa que podamos colectar», subrayó el juez, quien contó que «se han secuestrado ropas con restos que serían semen» y que se está a la espera de los resultados de laboratorio para realizar luego estudios de ADN. El magistrado sostuvo que sospechoso, quien trabajaba como jardinero en la zona y no tenía antecedentes, prestaría declaración este martes.
El episodio ocurrió el sábado al meidodía. La menor, de 3 años, fue hallada por su madre, identificada como Ana María Guzmán, de 19 años. La chiquita estaba aún con vida. La mujer dio rápido aviso a la policía y a un servicio de emergencia que trasladó a la nena hasta el Hospital Central de Reconquista, donde fue ingresada ya sin vida.
Voceros de la investigación señalaron que la nena tenía golpes en todo el cuerpo, tenía cinco costillas fracturadas, además de gravísimos daños en el hígado y en uno de los pulmones. Además, presentaba un desgarro vaginal. (Rosario3)