Martino se fue del cargo con duras acusaciones contra Binner
El radical Edgardo Martino acató ayer la sugerencia del gobernador Hermes Binner —lo instó a dejar la titularidad de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) por el «vergonzoso» nombramiento de más de doscientos agentes sin llamado a concurso—, pero al dejar la repartición echó más leña al fuego en la recalentada interna oficialista al enrostrarle al gobernador «588 designaciones» durante los dos últimos años en otras áreas del Estado santafesino.
El radical Edgardo Martino acató ayer la sugerencia del gobernador Hermes Binner —lo instó a dejar la titularidad de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) por el «vergonzoso» nombramiento de más de doscientos agentes sin llamado a concurso—, pero al dejar la repartición echó más leña al fuego en la recalentada interna oficialista al enrostrarle al gobernador «588 designaciones» durante los dos últimos años en otras áreas del Estado santafesino.
«Desde el 2009, tras la firma del decreto 291, que dispuso el ingreso por concurso de oposición y antecedentes en la administración pública provincial, fueron contratados en la API, Catastro y Lotería 588 agentes, cuyo ingreso a la planta permanente debió luego convalidar la Legislatura de la provincia. Con el razonamiento del señor gobernador ¿la conducta de todos los ministros y de los funcionarios a cargo de estas reparticiones también ha sido «vergonzante y lamentable»»?, disparó el ex funcionario, que formalizó su alejamiento en conferencia de prensa luego de reunirse ayer con legisladores del radicalismo en el Parlamento provincial.
En otro capítulo del revulsivo que generaron puertas adentro del Frente Progresista las declaraciones del gobernador reclamando a los radicales que se «hicieran cargo» del despido de Martino de la DPV luego de que el propio mandatario le exigiera públicamente la renuncia al subadministrador Rafael de Córdoba (de extracción socialista), ayer el intendente santafesino y principalísimo referente del radicalismo provincial, Mario Barletta, salió a respaldar al dimitente funcionario sancristobalense.
Martino «me ha dado los argumentos y elementos a partir de lo cual todo lo que se realizó se hizo de acuerdo a la normativa vigente», y «tiene el apoyo en este difícil trance que nadie hubiera querido pasar», sostuvo el jefe del Ejecutivo capitalino.
Responsabilidades. Con relación a las manifestaciones de Binner, se desmarcó: «No soy quién para andar juzgando los términos o lo señalado por el gobernador. Cada uno tiene sus responsabilidades, y sabemos qué es lo que hay que hacer en estas circunstancias».
No obstante, ante una consulta, ejemplificó que si en el gobierno de la ciudad capital se hubiera suscitado una circunstancia similar a la detonada en Vialidad «hubiéramos hecho una investigación mediante una auditoría y luego tomado las medidas que dicha investigación señale, pero esas medidas las hubiese adoptado yo», se diferenció Barletta de la actitud adoptada anteayer por el jefe de la Casa Gris.
Con todo, el dirigente radical le bajó los decibeles a la polémica al afirmar que «esto no incomoda la relación en el Frente, en absoluto. Seguimos en un muy buen diálogo con el gobernador electo y somos muy optimistas en arribar a un esquema fuerte de gobierno el 10 de diciembre», aseguró el intendente.
Lo cierto es que Martino fundamentó su paso al costado al frente de la DPV en una actitud de «solidaridad» con su segundo, eyectado de su sillón por Binner, y precisó que la decisión adoptada ayer fue notificada «a los diferentes bloques de la UCR en la Legislatura».
En ese plano, evaluó que «tienen un gran sentido político estas declaraciones, más en el momento de negociaciones que se producen», en implícita alusión a la conformación del gabinete de la próxima administración frentista.
Intermediación. En cuanto a la referencia del gobernador a que su situación la resolviera el radicalismo, le recordó a Binner que «está tratando con un funcionario, y no debería sacarse el lazo». «Si me quería pedir la renuncia, lo hubiera hecho personalmente o públicamente y no a través de mi partido. Mi partido ya tiene el conocimiento de mi decisión porque no puedo permitir que mi honor y mi buen nombre a través de todos los cargos que ocupé sea manoseado», devolvió.
Además de manifestarse «dispuesto a aclarar todas las dudas» relacionadas con las 230 contrataciones en la DPV que comandaba hasta ayer, aseguró que «la metodología» utilizada para las designaciones «viene siendo realizada desde siempre, porque lo faculta la ley a través del convenio colectivo de Vialidad». En ese plano admitió la contratación de un familiar y de más de treinta personas del departamento San Cristóbal, del que es oriundo.
«A principios de la gestión se dieron distintas contrataciones y a partir del año pasado yo incorporé algunos contratos, y nunca se me objetó esta metodología», situación que Martino consideró «habitual» en la repartición. Al aludir a la frase del gobernador, que dijo haberse enterado por los diarios de los nombramientos en la DPV, afirmó: «No entiendo por qué la desinformación del señor gobernador, cuando en las actas están las firmas de todos los que participamos en esta negociación con el gremio». «El gobernador ha estipulado que el gremio debe hablar con el administrador, y eso es lo que venimos haciendo», agregó.
También se diferenció de su correligionario Jorge Placenzotti, quien lo antecedió al frente de Vialidad y debió abandonar el cargo salpicado por un áspero conflicto gremial. «Con nosotros volvieron el diálogo y el consenso», cotejó Martino.
Concluyó afirmando que actuó con autonomía en materia de designaciones porque «creí que tenía los canales de comunicación necesarios. A principio de año contraté distintos servicios y nunca lo informé en forma directa. Me parecería un despropósito que ante cada medida que la ley me marcaba yo tenía que estar avisándole al gobernador». (El Litoral)