Y el Premio Nobel de Literatura es para… ¡¡Tomas Tranströmer!!

El poeta sueco Tromas Tranströmer fue distinguido hoy con el Premio Nobel de Literatura porque «a través de sus imágenes condensadas y translúcidas, aporta un fresco acceso a la realidad«, según anunció la Academia Sueca en Estocolmo.

«La mayor parte de la colección poética de Tranströmer está impregnada de ahorro, de concreción y de metáforas expresivas«, añade sobre este poeta, de 80 años, psicólogo de formación.

En sus últimas obras Tranströmer «tiende a un formato aún más reducido y a un grado aún mayor de concentración«, explica el comunicado.

El galardón está dotado de diez millones de coronas suecas (1,1 millones de euros/1,47 millones de dólares).

La entrega del premio tendrá lugar el próximo 10 de diciembre en Estocolmo. El año pasado, el Nobel de Literatura fue para el escritor peruano Mario Vargas Llosa. (Infobae)

 

PRELUDIIUM

Despertar es un salto en paracaídas del sueño.

Libre del agobiante torbellino, se hunde

el viajero hacia la zona verde de la mañana.

Las cosas se encienden. Él percibe -en la vibrante

postura de la alondra- las oscilantes lámparas subterráneas

del poderoso sistema de las raíces de los árboles. Pero la flor

de tierra

-en abundancia tropical- está el verdor

con los brazos al aire, en escucha

del ritmo de una bomba invisible. Y él

se hunde hacia el verano, se descuelga por

el cráter cegador, hacia abajo

a través de grietas de edades verde-húmedas

palpitantes bajo la turbina del sol. Así es detenido

este viaje vertical por el instante y las alas se ensanchan

hasta ser la quietud del gavilán sobre aguas torrenciales.

Tonos desamparados

de las trompetas de la Edad de Bronce

cuelgan sobre el abismo.

En las primeras horas del día, la conciencia puede abarcar

el mundo

como la mano oprime una piedra entibiada por el sol.

El viajero está bajo el árbol. ¿Se extenderá,

después de la caída por el torbellino de la muerte,

una gran luz sobre su cabeza?