Perú: El Gobierno sacó el Ejército a las calles ante las protestas por la destitución de Castillo
El ministro de Defensa de ese país, Alberto Otárola, informó que la decisión de la nueva presidenta, Dina Boluarte de declarar en estado de emergencia a las regiones de Arequipa e Ica permitirá “restablecer el orden público”.
El Gobierno de Perú dijo que desplegará soldados para proteger sitios estratégicos y que declaró el estado de emergencia en dos regiones del sur sacudidas por mortales protestas por la destitución del ex presidente Pedro Castillo.
«Se va a declarar en emergencia la red vial nacional, para asegurar el libre tránsito de todos los peruanos», declaró el ministro de Defensa, Alberto Otárola, a su salida de una reunión del Consejo de Estado en Lima.
El ministro agregó que «se ha dispuesto la inmediata protección de las Fuerzas Armadas de puntos estratégicos nacionales, infraestructura que sirve para asegurar la vida de todos los peruanos».
Otárola también informó de la decisión del Ejecutivo de la nueva presidenta Dina Boluarte declarar en estado de emergencia a las regiones de Arequipa e Ica en aras de «restablecer el orden público».
«Los departamentos de Arequipa y de Ica se suman a la emergencia decretada en Andahuaylas», una provincia del departamento de Apurímac, esta semana, dijo.
Esto permitirá «que las Fuerzas Armadas en apoyo de la Policía Nacional puedan tomar el control del orden interno», agregó en declaraciones a medios, informó la agencia de noticias Europa Press.
El ministro dijo que la situación del país era «grave y preocupante», aunque recalcó que, con esa preocupación, tienen la «responsabilidad constitucional de preservar la vida y la integridad de todos los peruanos».
La decisión del Gobierno de Perú tiene lugar en medio de los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes a causa de las protestas que se están registrando en el país tras la destitución y la detención del expresidente Castillo.
Hasta la fecha, las protestas, en las que se pide al nuevo Ejecutivo que disuelva el Congreso y convoque elecciones presidenciales, se han cobrado la vida de al menos seis personas, según la Defensoría del Pueblo.
Castillo, de 53 años, fue destituido la semana pasada por el Congreso luego de intentar disolverlo. El exmandatario acusa a la oposición de derecha, que controla el Parlamento, de haber querido dar un golpe de Estado en su contra desde que llegó al poder, en 2021.