Central tuvo un partido para el olvido y fue goleado por Central Córdoba en el Gigante
El Canalla perdió por 3 a 0 con el Ferroviario, en Arroyito, con goles de González Metilli, Soraire y Martínez, por la fecha 11 de la Liga Profesional. De esta manera, el equipo de Tevez volvió a caer luego de cuatro partidos.
Rosario Central cayó por 3 a 0 ante Central Córdoba en el Gigante de Arroyito, con goles de González Metilli, Soraire y Martínez, por la fecha 11 de la Liga Profesional.
Ya desde el comienzo, el Canalla buscó imponer condiciones, presionando y tratando de recuperar rápido la pelota y hacerse dueño del juego.
Central estaba mejor parado, lucía con movimientos más afianzados respecto a su rival. La pelota circulaba rápido y segura por los jugadores auriazules.
Sin embargo, la primera llegada al arco fue para los santiagueños, a los 15, cuando Servio tapó un mano a mano a Bay entrando al área, tras una gran asistencia de Soraire. A los 18, Martínez sacudió de zurda de media distancia y su remate se fue apenas desviado del arco canalla. Central Córdoba se empezó a acomodar en el campo, y volcó su juego por el sector de Blanco.
Los avisos de la visita tuvieron su concreción a los 23, cuando González Metili, de volea y de zurda, la puso en el ángulo del arco de Servio y abrió el marcador. Golazo y golpazo en el Gigante.
Central tuvo la suya a los 27, cuando Buonanotte se metió en el área, apiló a varios jugadores, con caño incluído, y Rigamonti alcanzó a frenar el avance del juvenil y quedarse con la pelota. A los 33, un bombazo de Benítez de media distancia fue desviado por el arquero de la visita al córner.
Central sintió el impacto anímico del gol, ya no tuvo la misma fluidez, y su rival, agrandado, se permitió manejar el encuentro, a raíz del buen pie del atrevido Martínez.
Por eso, no extrañó que a los 39, Soraire, dentro del área, de media vuelta y de zurda, con desvío incluido, amplió el marcador para la visita. Era justo, Central Córdoba era más, ante un Canalla con confusión y dudas.
A los 42, una gran habilitación de Benítez encontró a Blanco por izquierda, que remató a la carrera y la pelota cayó en el techo del arco. Así se fueron al descanso, con un Central que fue de mayor a menor, y dio ventajas en defensa. Su rival fue inteligente y explotó muy bien las espaldas del equipo de Tevez.
En el complemento, el Canalla salió a vender cara la derrota, y rápidamente fue en busca del descuento. Ya con Ramírez en cancha, la idea era darle otra presencia al ataque, ante la pobre tarea de Marinelli en la primera mitad.
Tuvo el descuento a los 12, cuando un cabezazo de Benítez en el área pegó en el palo y salió afuera. La visita esperaba replegada atrás, ya con la comodidad de la ventaja obtenida.
A los 15, Servio contuvo un zurdazo de media distancia de González Metilli.
Central fue, pero no tuvo claridad en los metros finales. A las mencionadas ventajas en defensa se le sumó una endeble contención en el mediocampo, e imprecisiones producto de la desesperación.
El Canalla volvió a llegar a los 32, con un derechazo violento de Ramírez entrando al área, producto de una corajeada individual, que Rigamonti alcanzó a tapar. La vista respondió con un fierrazo de Renzo López de afuera que contuvo Servio, a los 34.
A los 38, los santiagueños liquidaron la historia. Martínez, de penal, la colocó de zurda, al ángulo de Servio. Trámite definido.
No hubo tiempo para más, un partido para el olvido de Central, no le salió nada. Deberá barajar y dar de nuevo, seguir trabajando, y tratar de incorporar una identidad como equipo. Tiene revancha rápido el jueves por Copa Argentina, ante Quilmes. Tendrá que reponerse de este mazazo.