Arranca el juicio por el asesinato del personal trainer Marcos Guenchul

Priscila Denoya, Santiago «Caio» Soso y Maximiliano Panero son los tres imputados que tiene la causa por el asesinato de Marcos Guenchul.

Priscila Denoya, Santiago “Caio” Soso y Maximiliano Panero son los tres imputados que tiene la causa por el asesinato de Marcos Guenchul. En el marco de un conflicto por el régimen de visita de su hija, el personal trainer murió el 23 de julio de 2019 por un disparo en la cabeza. Este miércoles se conocerán los alegatos de los fiscales en el comienzo del juicio.

Adrián Spelta y Gisela Paolicelli pidieron en septiembre pasado una pena de prisión perpetua para los tres acusados. El juicio, que comenzará durante esta jornada, será comandado por el tribunal de Primera Instancia. El mismo estará compuesto por Mariano Aliau, Facundo Becerra y Carlos Leiva. En su momento, el caso había sentado jurisprudencia por ser un delito intrafamiliar de “ajuste de cuentas”.

Guenchul tenía una hija con Denoya, pero una mala relación con ella hizo que el personal trainer estuviera durante varios meses sin poder ver a la menor. “Caio” Soso, pareja de la mujer y embarazada en ese momento de él, es el principal acusado por el asesinato del profesor de gimnasia, y fue detenido en el Aeropuerto de Ezeiza cuando intentaba escaparse a Beirut.

Asesinato de Guenchul

Según pudo reconstruir la Fiscalía, Caio Soso y Priscila Denoya fueron señalados por ofrecer dinero a Panero por el asesinato de Guenchul. De esta manera, Soso y Panero habrían esperado en zona de Mendoza al 4900 a que saliera del gimnasio “Progress Fitness” a las 21.50hs. Acto seguido, Panero lo habría interceptado antes que tomara el colectivo, lo redujo y lo obligado a doblar por calle Sucre hacia el sur. Todo ello mientras Soso se posicionaba con su automóvil por esa vía.

Luego, Panero le habría quitado la mochila y le efectuado dos disparos, uno de ellos en su cabeza, que le provocó la muerte. Horas más tarde, los hombres se habrían encontraron con Denoya, para la entrega del dinero pactado. Marcos Guenchul tenía 32 años y mantenía un conflicto con su ex por el régimen de visitas a su hija Tiziana, de 3 años, a quien llevaba siete meses sin ver.