Un sábado a sangre y fuego en Ucrania
Con las primeras horas de la mañana del sábado Ucrania comienza a ver con claridad meridiana la resultante de una noche terrorífica para los habitantes ucranianos y, obviamente para los soldados de ese país que lograron rechazar un intenso ataque, a gran escala, terrestre y con misiles.
Ello, complementado con ataques aéreos y con soldados desembarcados en las costas del Mar Negro, amplificaron la crudeza de una agresión incomprensible y asesina en el caso de los civiles abatidos por infantes rusos y embestidos por carros blindados que ingresaron a Ucrania desde el norte, el este y el sur para intentar tomar la capital luego de rodearla como indican los manuales militares.
Al contrario de lo que se presumía como la resultante de los enfrentamientos de la noche del sábado, hay versiones disímiles sobre los combates, ya que las dos partes se dicen ganadores, aunque vale recalcar que este sábado las calles de Kiev están vacías, dando un aspecto fantasmal, con negocios cerrados en un perímetro de un kilómetro del Palacio Presidencial.
Se escuchan los disparos de los morteros y la población, que recibió alrededor de 18.000 armas del ejército, está preparada para ayudar en la resistencia de las fuerzas armadas que lograron derribar aviones rusos y hasta un helicóptero, a lo que se agrega la información no confirmada, del abatimiento de un avión con paracaidistas rusos que fue destruido en el aire, cuyo objetivo era el de lanzarse sobre Kiev en este sábado. Obviamente, también hay aviones ucranianos derribados.
Otro hecho impensado para los amantes de la paz es que algunos de los misiles impactaron en zonas civiles, según Estados Unidos, que como ya señalamos en otras columnas, sigue desde el Pentágono el derrotero de los hechos, con apoyo de sus bases de inteligencia en los países de la OTAN. Esas mismas fuentes habrían dejado conocer que los rusos han estado encontrando más resistencias que las previstas, fundamentalmente en la ruta invasiva que pretende llegar al centro de Kiev, luego de ocupar Chernóbil.
Es que la resistencia ucraniana no duda en volar puentes como el que existía sobre el río Teteriv, a lo que hay que agregar que destruyó 30 tanques.
El gobierno ucraniano prohibió la salida de reservistas entre 18 y 60 años, a los que se les entregaron armas, ya que poseen entrenamiento. Ello ocurrió en el marco de una movilización general en todas las ciudades de Ucrania.
Refugiados
Las guerras, como la que nos ocupa, no importando el nivel de agresión, desencadena un castigo paralelo: la necesidad imperiosa de refugiarse para salvar la vida: Ya se habla de más de 50.000 ucranianos en ese estado desde hace 72 horas y los países elegidos para intentar sobrevivir fueron Polonia y Moldavia.
Se ha dado cuenta que 59 colombianos abandonaron Ucrania en las últimas horas y la Embajada de Ucrania en Polonia registró un total de 219 ucranianos, mientras que otros refugiados e dirigieron a Hungría y Eslovaquia.