Murió el dirigente radical Raúl Baglini, autor de un «teorema» que lleva su nombre
Falleció esta madrugada en Mendoza, la provincia que representó como legislador entre 1983 y 2003. Tanto sus correligionarios como sus adversarios lo reconocían como uno de los cuadros más brillantes del radicalismo
El exdiputado y exsenador mendocino Raúl Baglini murió esta madrugada en Mendoza. Nacido el 23 de diciembre de 1949, había cumplido recientemente 71 años.
Abogado y dirigente del radicalismo, Baglini fue uno de los legisladores más brillantes de la UCR y en los debates sobre la deuda en la década del ochenta, cuando defendía vigorosamente al gobierno de Raúl Alfonsín, postuló lo que en adelante se conoció como el “Teorema de Baglini”, según el cual la audacia de las propuestas de los partidos y dirigentes políticos era inversamente proporcional a la distancia que tenían con el poder: a mayor distancia, era la idea, mayor audacia e irresponsabilidad. Y a la inversa.
Baglini fue legislador durante 20 años, entre 1983 y 2003 y había estudiado derecho en la Universidad Nacional de Córdoba, donde inició su militancia en la UCR.
”Es un día muy triste para los que lo conocimos y tuvimos la suerte de tener su amistad. Hoy falleció Raúl Baglini, un dirigente ejemplar de la UCR y uno de los más destacados legisladores que tuvo nuestro país en las últimas décadas. Lo vamos a extrañar mucho. Abrazo a su familia”, lo despidió en su cuenta de twitter el titular del bloque de diputados radicales, Mario Negri.
Baglini también había sido candidato a gobernador de Mendoza en 1987, en las elecciones que ganó el también exsenador y excandidato presidencial (en 1995) José Octavio Bordón. Como diputado, ejerciò durante varios años la presidencia de la Comisiòn de Presupuesto y Hacienda (entre sus asesores se contaba el actual presidente del BCRA, Miguel Pesce) y se recuerdan sus memorables debates sobre la deuda externa, en la que confrontaba dialécticamente con el diputado justicialista Diego Guelar, luego embajador en Brasil, EEUU y China.
“El teorema de Baglini está más vivo que nunca!!! Asi como su hombría de bien, su sensatez y su conviccion republicana. Un ejemplo de político y ciudadano que los mas jóvenes deberían tener muy en cuenta para no caer en el cinismo y el oportunismo tan en boga hoy en dia”, escribió en un mensaje de WhatsApp Guelar cuando Infobae le pidió evocar al fallecido político mendocino.
Legisladores y políticos más jóvenes, como Martìn Lousteau y Alfonso Prat-Gay, recordaron con elogios a Baglini. “Lamentamos mucho el fallecimiento de Raúl Baglini, excelente dirigente mendocino de la UCR. Fue un extraordinario legislador, gran conocedor de todo lo relacionado con cuestiones de presupuesto. Un abrazo grande a su familia y amigos”, escribió Lousteau, en tanto Prat-Gay escribió: “Difícil de llenar el espacio que deja vacío la partida del querido #RaúlBaglini , un político distinto. Siempre la mirada puesta en el largo plazo. Comprendía los intereses de su oponente y en eso su política era también “el arte de lo posible”. Otro economista de una generación posterior a Baglini, Eduardo Levy Yeyati, se preguntó “¿Cuántos políticos argentinos le dieron su nombre a un teorema? QEPD”.
Por su parte, la UCR de Mendoza despidió “con muchìsima tristeza” a Baglini. “Un gran dirigente que ha dejado un legado importante para la vida partidaria y Argentina.
Fue en el fragor de los debates de los ochentas, en medio de lo que se conoció como “la década perdida” para las economías de América Latina, agobiadas por el peso de la deuda externa, que Baglini formuló su “Teorema”.
Por entonces, diversas propuestas hablaban de la posibilidad de una moratoria unilateral de la deuda, la formación de un “Club de Deudores” latinoamericanos o replicar la fórmula que aplicaba en Perú el entonces presidente de ese país, Alan García, que había fijado un límite a los pagos de deuda equivalente al 10% de las exportaciones. Por esos años, la visita del presidente peruano a la Argentina fue recibida por el peronismo con carteles por todo Buenos Aires que rezaban, “Patria mía, dame un presidente como Alan García”.
Baglini defendía las posiciones más prudentes del gobierno de Alfonsín y fue en ese contexto que en un debate parlamentario postuló su famoso “Teorema”, llamado así por la forma en que lo expuso, como si fuera una formulación física o matemática. Según Baglini, la audacia y temeridad de las propuestas era “inversamente proporcional a la distancia al poder” de quienes las formulaban. Algo que luego se confirmaría, por ejemplo, con el “salariazo”, una de las consignas con las que Carlos Menem llegó a la presidencia en 1989, la promesa “el que depositó dólares recibirá dólares” de Eduardo Duhalde, la “revolución ferroviaria” de Néstor Kirchner, la promesa de “calidad institucional” que insinuaba la primera campaña presidencial de Cristina Kirchner, la “pobreza cero” de Mauricio Macri y el aumento del 20% a los jubilados que prometió en 2019 el actual presidente, Alberto Fernández, a pagar -supuestamente- con la reducción de los intereses de las Leliq, suerte de pagaré de cortísimo plazo del Banco Central a los bancos privados.
Como diputado, además de presidir la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, Baglini fue también vicepresidente del cuerpo. Luego, su estatura política y su ascendiente intelectual lo llevaron a presidir la Convención Nacional de la UCR. Además, cuando Julio Cobos decidió como “radical K” acompañar en la fórmula presidencial en 2007 a Cristina Kirchner, algo a lo que no fue ajeno el actual senador y presidente de la UCR, Alfredo Cornejo, ayudó a reorganizar la UCR mendocina.
A principios de la década pasada, Baglini se había retirado de la política activa, debido a sus frecuentes problemas de salud. Murió a las 3 de la mañana de este domingo y desde su entorno familiar aseguraron a medios mendocinos que no tenía coronavirus.