El Congreso estadounidense inicia un histórico juicio político contra Donald Trump
Un total de 100 senadores se reunirán en el Congreso para el juicio que comenzará a las 15 (hora de Argentina), y que probablemente concluya con la absolución del mandatario.
El histórico juicio político contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comienza este martes 21 de enero en el Senado, con la división partidista que caracteriza su mandato: mientras la oposición demócrata lucha por apartarlo del cargo, los republicanos que controlan la Cámara Alta buscan una rápida absolución. El impeachment ocurrirá cuatro meses después de que estallara el escándalo ucraniano que manchó al mandatario y 10 meses antes de las elecciones presidenciales.
Un total de 100 senadores se reunirán en el Congreso para el juicio que comenzará a las 13 horas (15 de Argentina), y que probablemente concluya con la absolución del mandatario. Los legisladores —que juraron la semana pasada para ser jurados en el proceso— deben decidir sobre los cargos que la Cámara de Representantes le imputó a Trump el mes pasado: abuso de poder y obstrucción al Congreso. A partir de este martes, los senadores establecerán las reglas el proceso que estará presidido por el jefe de la Corte Suprema, John Roberts, que ejerce un rol más bien protocolar. Pero el presidente no estará este martes en Washington ya que viajó el lunes a Davos para participar en el Foro Económico Mundial en la estación suiza, hacia donde partió sin hacer declaraciones.
Se espera que los senadores voten de acuerdo a los lineamientos de su partido: Trump cuenta con el apoyo de la mayoría republicana que domina el hemiciclo con 53 escaños, por lo que el juicio político no tiene visos de prosperar. En este contexto, estos crispados intercambios están orientados hacia la opinión pública, en un momento en que se acerca el inicio de las primarias demócratas de cara a las presidenciales.
La llamada
El 25 de julio, Trump pidió por teléfono al nuevo presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que Kiev investigara a Joe Biden, su posible rival demócrata en las presidenciales de 2020, y a su hijo Hunter.
La investigación Los demócratas de la Cámara de Representantes abrieron una investigación con miras a un juicio político contra Trump el 24 de septiembre, tras enterarse del contenido de la conversación entre él y Zelenski gracias a un denunciante anónimo. La oposición sospecha que presionó a Ucrania al condicionar una ayuda militar de unos 400 millones de dólares al anuncio de esas investigaciones.
Trump asegura que sus conversaciones con Zelenski fueron «perfectas» y repite, sin pruebas, que Joe y Hunter Biden son «corruptos», porque el hijo del exvicepresidente demócrata estuvo en el directorio de Burisma, un grupo de gas ucraniano acusado de prácticas dudosas.
Tensas audiencias públicas
En octubre y noviembre, el Comité de Investigación de la Cámara interrogó a una decena de testigos durante audiencias a puerta cerrada y luego públicas. La Casa Blanca se negó a colaborar, y el jefe de gabinete del presidente, Mick Mulvaney, y el exasesor de Seguridad Nacional John Bolton no testificaron. Testimonios indirectos de diplomáticos o de funcionarios de la administración señalaron presiones de Trump a Kiev. El embajador estadounidense para la Unión Europea, Gordon Sondland, hizo el testimonio más comprometedor. El empresario nombrado por Trump confirmó que el presidente estadounidense había invitado a Zelenski a la Casa Blanca a cambio del anuncio de investigaciones contra Biden, según las «órdenes» del mandatario republicano. Pero Trump «nunca le dijo directamente que la ayuda» militar formaba parte del acuerdo, y Sondland admitió que hizo «su propia deducción» al vincular los dos casos.
Los congresistas republicanos apoyan a su líder: no hubo ningún acuerdo de toma y daca ya que la ayuda militar se dio a Ucrania sin que Kiev anunciara ninguna investigación, y Trump sólo usó sus prerrogativas presidenciales para luchar contra la corrupción en Ucrania. Los republicanos denuncian testimonios basados en rumores y hablan de una teoría conspirativa según la cual Ucrania, y no Rusia, interfirió en las elecciones de 2016 para ayudar a los demócratas.
Dos cargos contra Trump
El Comité Judicial de la Cámara aprobó el 10 de diciembre dos cargos contra Trump. Según la acusación, Trump cometió «abuso de poder» al pedirle a Zelenski que abriera una investigación sobre Biden. Al hacer eso socavó «la integridad» de los comicios del próximo año.
Los demócratas del Comité también acusaron al presidente estadounidense de «obstaculizar el buen funcionamiento del Congreso» al impedir que los miembros de su administración testificaran durante la investigación. Trump se convertirá probablemente en el tercer presidente de la historia de Estados Unidos juzgado en el Congreso, tras Andrew Johnson (1868) y Bill Clinton (1998). En 1974, Richard Nixon dimitió antes de la votación en la Cámara. «El presidente no hizo nada malo» Este lunes, la polarización entre ambas partes -que caracterizó el proceso desde que emergieron las primeras acusaciones- se hizo patente una vez más cuando el equipo legal del presidente estadounidense publicó un escrito de 100 páginas en el que pidió al Senado absolver inmediatamente a Trump.
El texto califica al juicio como una «peligrosa perversión de la constitución» y un casi simultáneamente los impulsores del proceso contra Trump en la Cámara de Representantes publicaron un documento explicando que el mandatario había incurrido en una «conducta corrupta» con el objetivo de hacer trampa en la próxima elección. «El presidente no hizo nada malo», sentenciaron los abogados de Trump, un equipo de alto nivel con figuras como Kenneth Starr, que participó en el proceso contra Clinton tras el escándalo por su relación con Monica Lewinsky.