El Congreso de la nación repudió el «Golpe de Estado» en Bolivia
La Cámara de Diputados y la de Senadores trataron proyectos del oficialismo y de la oposición, que fue finalmente aprobado, sobre la cuestión boliviana.
La Cámara de Diputados y el Senado, tras largas sesiones, emitieron formalmente un «repudio al golpe de estado» en Bolivia, en medio de diferencias dentro del oficialismo y críticas a la postura del Gobierno.
Luego de la Asamblea Legislativa que proclamó ganadora a la fórmula Alberto Fernández-Cristina Kirchner, ambas Cámaras iniciaron sendas sesiones para discutir el rechazo a lo sucedido en el país vecino.
Tras varias horas de debate, el Senado aprobó pasadas las 20:30 la declaración de «enérgico repudio al golpe de Estado» en Bolivia impulsada por el peronismo, aunque varios legisladores de Cambiemos cambiaron el sentido su voto sobre el final para evitar que la sesión se quedara sin quórum.
La declaración salió con 29 votos a favor, 8 en contra y 4 abstenciones, pero en realidad hubo seis senadores de Cambiemos que iban a abstenerse y votaron en contra para evitar que la sesión se quedara sin quórum, por lo que los votos en contra genuinos fueron dos.
Dado que las abstenciones restan al quórum necesario para sesionar (37 senadores), la oposición y el oficialismo acordaron en pleno recinto, con la mediación del presidente provisional de la Cámara, Federico Pinedo, evitar esa situación.
El acuerdo final fue consecuente con el clima del debate, donde a pesar de que el peronismo y Cambiemos presentaron proyectos separados y de que no faltaron críticas a la posición del Gobierno, los senadores se cuidaron de llevar adelante una sesión sin estridencias ni confrontación.
Por su parte, la Cámara de Diputados aprobó por medio de la votación a mano alzada, el proyecto de declaración en repudio al «golpe de Estado» en Bolivia que impulsó la oposición.
El mecanismo de votación fue resuelto por el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, luego de que la oposición y el oficialismo no pudieran limar diferencias y ponerse de acuerdo en un texto común.
Tras casi 5 horas de sesión, Cambiemos se encaminaba a la abstención pero la modalidad de votación impidió que pudiera expresarse en ese sentido.
El proyecto oficialista evitaba la expresión «golpe de Estado» y en cambio proponía aludir a lo sucedido en Bolivia con la salida de Evo Morales como una situación de «quiebre institucional».
Diferencias entre proyecto de «repudio al golpe» de la oposición y del oficialismo
Mientras que el proyecto de declaración de la oposición en la Cámara de Diputados expresa un «profundo repudio al golpe de Estado perpetrado» en Bolivia, el pronunciamiento de Cambiemos estaba más suavizado, pero rechaza «las condenables intervenciones policiales y militares» y cuestiona «cualquier golpe contra la democracia».
El proyecto del oficialismo, que fue replicado en el Senado, ingresó este miércoles por mesa de entradas, con las firmas del jefe del interbloque, Mario Negri (UCR), Álvaro González (PRO) y Juan Manuel López (CC-ARI).
El texto ratificaba «el compromiso con la Cláusula Democrática de la OEA y el Protocolo de Ushuaia del Mercosur», y condena «los ataques contra el sistema democrático, sufridos por el Estado Plurinacional de Bolivia, las condenables intervenciones Policiales y Militares en el proceso político, como así también las gravísimas alteraciones a la voluntad popular que desembocaron en el anuncio de una nueva convocatoria a elecciones Presidenciales».
El proyecto rechazaba «cualquier golpe contra la Democracia y todo tipo de violencia, apoyando las autoridades constitucionales y la alternancia democrática», en tanto que llaman al «inmediato restablecimiento pleno del Estado de Derecho que garantice la paz en el pueblo de Bolivia a través de la convocatoria y realización de elecciones con total transparencia».
En otro pasaje, se condenaba «en la forma más enérgica el quiebre institucional cuya magnitud todavía no llega a determinarse» y advierte que «es particularmente preocupante que reaparezcan en nuestro continente injerencias directas de las Fuerzas Armadas propiciando la renuncia de autoridades civiles».
En los fundamentos, también se apuntaba contra Evo Morales por una serie de hechos previos que dieron lugar a la reacción del sector social que bregó por la salida del Gobierno del MAS: «El incumplimiento de los límites que la Constitución impone a los mandatos presidenciales, el desconocer la voluntad popular expresada en el plebiscito, la interrupción del escrutinio y la aparición de un resultado que en el límite evitaba la segunda vuelta, fueron haciendo crecer un reclamo que fue subiendo en intensidad y violencia».
El proyecto de la oposición, que es el que fue aprobado, en cambio no carga responsabilidades en el Gobierno de Morales, y agrega que la convocatoria a elecciones debe realizarse «sin proscripciones», en referencia a la sospecha de que el partido de izquierda MAS podría ser excluido.
Además, la declaración opositora hace un exhorto a «todo el arco político de la región a exigir el cese inmediato de la persecución y violación de derechos humanos de funcionarios/as, dirigentes/as políticos, sociales, sindicales, feministas y de la población en general». (IProfesional)