El socialismo en la carrera hacia la gobernación
El domingo pasado se realizaron internas abiertas en la provincia de Santa Fe, donde la ciudadanía pudo elegir los candidatos de los partidos políticos que finalmente competirán a fines de julio en las elecciones provinciales generales. En los comicios, se estrenó con éxito la boleta única, donde el elector debe señalar con un tilde a su candidato preferido según la categoría. El flamante sistema, exhibió claras ventajas sobre el anterior, evitando que tengan lugar vicios ya clásicos de la cultura electoral de nuestro país, como el robo de boletas en el cuarto oscuro y el voto cadena.
El día de elecciones ya pasó con resultados que se sabían de antemano. Para el binnerismo en el partido Socialista es todo un triunfo, ya que la apuesta por Bonfatti como precandidato a gobernador resultó acertada. El intendente de Rosario, Miguel Lifschitz –para muchos el “candidato natural” a ocupar la Casa Gris, se tuvo que conformar con su postulación a senador provincial por el departamento Rosario (sacando en esta categoría más votos que Bonfatti), acordando con Binner el nombre de Mónica Fein para sucederlo en la Intendencia, la cual hizo una excelente elección en la ciudad sacándole 14 puntos de diferencia a Jorge Boasso.
El gran perdedor de esta contienda fue el actual senador y presidente del partido Socialista de la República Argentina Ruben Giustiniani, que solo obtuvo el 20 % de los votos, poniendo en riesgo su presidencia al frente del mismo. Cuál será el costo que esta fracción del PS deberá pagar, es una de las preguntas que se deben estar formulando muchos militantes del socialismo.
El tono inusual de la interna socialista, obligó a sus socios de la UCR a disputar espacios y por esa razón, Barletta –el “vice natural”que no llegó a ser-, armó una lista con la Coalición Cívica y salió al ruedo sin muchas chances de ganar, posicionándose segundo en el recuento de votos final.
Con esta buena elección, el gobernador en funciones de la provincia, se lanzará a la carrera por la presidencia. Los llamados y la insistencia de Ricardo Alfonsin, desde el domingo a la noche, muestran el interés que Binner sea su compañero de fórmula. No obstante, una buena parte de la militancia socialista insiste que Binner debe armar una fórmula por fuera de la propuesta del radical, un espacio diferenciado como en los inicios del Frente Progresista en Santa Fe, avanzando hacia la posibilidad de construir a nivel nacional un verdadero espacio opositor al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
El 24 de julio se encuentra al doblar la esquina, la carrera ya comenzó, los nombres y las propuestas están; solo falta que la gente elija.