En el primer día del «cepo», el dólar bajó a $58,40, trepó el blue y las reservas perdieron más de u$s950 millones
El billete extraoficial se vendió a $64. Así, se registró la mayor brecha entre la cotización formal y la informal desde la llegada de Macri al poder.
En el primer día de vigencia de las restricciones cambiarias dispuestas por el Gobierno a través de un DNU y de las respectivas circulares del Banco Central, el mercado operó con marcada volatilidad en busca de un nuevo punto de equilibrio. Y si bien el dólar experimentó una baja de casi cuatro pesos y cotizó a $58,41 en agencias y bancos de la City porteña, el «blue» reapareció con fuerza en el centro de la escena al cotizar a $64.
Estos valores, se convirtieron en la mayor brecha entre el dólar oficial y el informal desde que la administración de Mauricio Macri levantó, en 2015, el cepo cambiario impuesto por el Gobierno de Cristina Kirchner cuatro años antes.
El «blue» es una de las opciones a través de las cuales se puede saltar el límite de u$s10.000 mensuales permitidos por el cepo parcial. En el Decreto 609/2019, se dispuso que el Banco Central establezca «las reglamentaciones que eviten prácticas y operaciones tendientes a eludir, a través de títulos públicos u otros instrumentos, lo dispuesto en esta medida».
En tanto, el Banco Central vio que sus reservas sufrieron una caída de u$s954 millones. Las reservas retrocedieron a u$s53.144 millones, de los u$s54.098 millones que habían sido informados el viernes último, a pesar de que el BCRA no debió intervenir en la plaza cambiaria.
Durante las primeras horas del lunes, la City porteña mostró la reacción de muchos ahorristas, que decidieron acercarse a las entidades bancarias para realizar operaciones o consultar sobre sus ahorros. Así se vio reflejado durante la mañana, con largas filas en las sucursales bancarias del centro de la ciudad de Buenos Aires.
En todas las sucursales de los bancos de la city, como el Santander, BBVA, ICBC se veía desde las 10:00 mucha gente haciendo cola para sacar turno y ser atendidos por cajas. En algunos lugares, incluso, los empleados ofrecían café y medialunas a los clientes. El clima, a pesar de la cantidad de gente, era de tranquilidad.
«¿Qué hicimos para llegar a esto?», se preguntaba un joven en voz alta, y salía, resignado, de la sucursal de un banco en San Martín y Bartolomé Mitre.
«Era previsible que iba a pasar esto, por suerte me traje algo para leer», comentó un hombre -no quiso dar su nombre- que tenía 30 personas por delante para ser atendido.
Por su parte, la tasa promedio total del día, equivalente a la tasa de política monetaria fue 85,275% y el monto total adjudicado fue de $246.623 millones. El Banco Central promedió una tasa del 84,167% en la primera licitación de Letras de Liquidez (Leliq), dijeron operadores. La entidad monetaria colocó $68.760 millones con una tasa mínima del 75% y una máxima al 86% para la operatoria a siete días de plazo.
La segunda subasta de Leliq fue por un monto de $177.863 millones a una tasa promedio de corte que se ubicó en 85,703% siendo la tasa mínima adjudicada de 79,900% y la máxima de 86,0001%.
El viernes el BCRA fijó una tasa de ‘Leliq’, equivalente a la tasa de política monetaria, del 83,264% tras la absorción de 165.109 millones de pesos en dos licitaciones.
Si bien en la previa a la apertura se observó una suba de las cotizaciones para las operaciones a través de las web de los bancos, que en algunos casos llevaron el precio hasta los $66,70, luego los precios fueron acomodándose a la baja.
En la primera jornada de las nuevas medidas que implementó el Gobierno entre el viernes y el domingo para intentar calmar el dólar y frenar la fuga de divisas, el dólar operó a la baja en bancos y agencias de Buenos Aires. Luego de un arranque en el que se disparó hasta casi rozar los $ 64, el control de cambios derrumbó fuerte la divisa, que bajó casi cuatro pesos, a $58,41.
De esta manera, se fue «limando» la diferencia entre el precio de compra y el de venta, que en algunos casos llegó a los 9 centavos, cuando en condiciones «normales» no supera los 3 pesos. En cuanto a las cotizaciones por entidad, de acuerdo al relevamiento que realiza iProfesional el detalle es el siguiente:
- Galicia: $59
- Nación: $57
- ICBC: $58,70
- BBVA: $59
- Supervielle: $60
- Santander: $58
En cuanto al segmento mayorista el precio de la divisa estadounidense cerró en en baja a $56,01, frente a los $59,51 del cierre anterior. Más allá del precio que rija a lo largo de la rueda, un conocido operador le confió a iProfesional que «recién mañana se podrá ver la reacción inicial del cepo en el mercado y en el resto de la semana se va a ver el efecto concreto sobre la cotización, con más exportadores liquidando y sin demanda. Es decir con el transcurso de los días se verá si encuentra o no un equilibrio».
«El motivo es sencillo: hoy es feriado en EE.UU., por lo que se reduce al mínimo las operaciones», concluyó.
Sobre este mismo tema, el analista Gustavo Quintana apuntó que «el feriado de hoy en los EE.UU., más las adecuaciones sistémicas al nuevo ordenamiento restringen la actividad en el mercado».
La otra cotización a tener en cuenta es la del dólar MEP, que surge de la negociación de bonos en el mercado local en pesos y dólares. En este caso, su precio es de $63,30.
En tanto, en el mercado de futuros Rofex los contratos con vencimiento a fines de año muestran una caída de las cotizaciones del orden del 10%, pues pasaron de $83,50 a $74,50 por lote.
Según el economista Nery Persichini, «se trata de la primera reacción del mercado» y agrega que «con una mayor oferta de dólares esperada por las medidas del BCRA, caen las expectativas de depreciación de corto plazo y las tasas implícitas descomprimen».
En tanto, el «contado con liquidación» se disparó a $65,22 luego de que se conoció la decisión del BCRA de limitar el giro de utilidades al exterior por parte de las entidades financieras.
Del conjunto de las disposiciones adoptadas por el Gobierno surge claramente que las restricciones son mucho más fuertes para el caso de las empresas, en especial las ligadas al comercio exterior, ya que en el caso de los particulares no solo podrán disponer libremente de sus depósitos sino también poder comprar hasta u$s10.000 por mes.
En otro orden, el índice de riesgo país que calcula el JP Morgan se ubica en un nivel de 2.530 puntos básicos. En el mercado local, no obstante, los bonos operan con fuertes subas, liderados entre los más negociados por el Bonar 2020, que gana un 6,7%, seguido por el Bonar 2024, que sube 5,9 por ciento. Por el lado de las acciones, sin la referencia de Wall Street, Pampa avanza casi 9%, en tanto que Supervielle y Transener operan con subas de más del 5 por ciento.
¿Cuáles son las alternativas para quienes quieren comprar más de u$s10.000?
A partir de las restricciones cambiarias anunciadas el domingo volvieron a sonar fuertemente términos que no se escuchaban desde el 16 de diciembre de 2015, el día en el que terminó el cepo impuesto por el kirchnerismo. Ellos son contado con liqui, MEP y dólar blue son hasta ahora las alternativas más habituales para quienes quieran hacerse de dólares por encima de las restricciones.
El Banco Central lanzó una serie de restricciones tendientes a asegurar el abastecimiento de dólares a empresas y ahorristas, entre las que se destacó que las exportadoras deberán liquidar las divisas producto de sus ventas en el país y que todas las compañías, no solo los bancos, tendrán que pedir autorización a la entidad monetaria para girar dinero al exterior.
Asimismo, se indicó que los clientes particulares podrán retirar o depositar la cantidad de dinero que deseen y comprar hasta u$s10.000 por mes. Ese mismo monto será el que una persona podrá transferir al exterior en el mismo lapso. La entidad indicó además que tampoco habrá ningún impedimento al comercio exterior ni restricciones sobre viajes.
Pero, ¿qué sucede si una empresa o una persona física quieren o necesita comprar más de u$s10.000? Las herramientas utilizadas en el cepo entre 2011 y 2015 vuelven a aparecer como alternativas.
Una opción es el dólar contado con liquidación o «contado con liqui», como se lo conoce popularmente, que es una herramienta que permite cambiar pesos por dólares en el exterior.
Primero, un individuo o una empresa compran en pesos acciones o bonos que coticen en la Argentina y en otro mercado internacional (por ejemplo, Wall Street). Luego, esos activos se transfieren a una cuenta en el exterior y se venden a cambio de dólares.
Para eso, hace falta tener una cuenta en el extranjero para que se acredite directamente el dinero allí. Para poder hacer la operación (y también para abrir la cuenta en territorio internacional), se recomienda la intervención de un agente de bolsa que intermedie. Es una operatoria que pueden realizar tanto personas físicas como jurídicas.
Por ahora, los agentes de bolsa consideran que es una opción válida para poder hacerse de dólares por encima del límite, ya que no hay especificaciones sobre si se prohibirá la herramienta o no. Como no hay actividad en los mercados estadounidenses por el feriado de Labor Day, aún no hay cotización del contado con liquidación.
Durante el kirchnerismo se cuestionó la legalidad de esta herramienta. Hacia el final del cepo, el Ministerio Público Fiscal denunció a un banco privado por el abuso del contado con liquidación, pero la Justicia falló a favor de la entidad financiera.
A su vez, el dólar MEP (la sigla de «mercado electrónico de pagos»), también conocido como «dólar bolsa», se consigue a través de la compra de un bono que cotiza en pesos, pero que es convertible al mismo bono que cotiza en dólares, por lo que puede venderse en moneda dura.
Además de las diferencias de cotización en ambos casos, los dólares MEP llegan a una cuenta en la Argentina, por lo que están sujetos a la regulación local. En cambio, la moneda que resulta de la operatoria del «contado con liqui» puede permanecer en una cuenta en el exterior. Ambas son operaciones legales.
En tanto, el dólar «blue», el eufemismo para hablar de las divisas que se consiguen en el mercado informal, está fuera del sistema financiero formal. Comprar esta divisa constituye una operación ilegal.
Se consigue a través de cuevas y » arbolitos», a un valor que puede ser mucho mayor al tipo de cambio oficial. A pesar de que el cepo terminó en diciembre de 2015, el dólar blue nunca dejó de existir, ya que se utiliza para operaciones en un circuito paralelo.
En la época del cepo, el dólar blue actuaba como un termómetro de las expectativas de los agentes económicos. Mientras la cotización oficial estaba casi planchada y limitada por las restricciones, la paralela se movía por la acción libre de la oferta y la demanda.
Si la brecha entre ambos tipos de cambio crecía, la incertidumbre aumentaba y hacía efecto sobre la inversión, el consumo y el empleo. Casi hacia el final del capo cambiario del kircherismo, el dólar blue llegó a ser un 66% más caro que el oficial.
Además, entre 2011 y 2015, por las restricciones a las importaciones, el blue también constituyó un precio de referencia. Algunos insumos terminaban valuados por el mercado ilegal e ingresados por contrabando. (IProfesional)