En Provincia de Buenos Aires, Vidal apuesta al corte de boleta y Kicillof al «voto Cristina»
La actual gobernadora se enfoca en los votantes de Lavagna, mientras el ex ministro de Economía se juega por los seguidores de la expresidenta.
La provincia de Buenos Aires es considerada el principal distrito para cualquier candidato a presidente: su peso en cantidad de votos es tal que puede definir quien estará sentado en el sillón de Rivadavia los próximos cuatro años.
Más allá del escenario de fuerte polarización, cada uno de los candidatos tiene su propia estrategia electoral para lograr imponerse tanto en las elecciones primarias del 11 de agosto como en las generales del 12 de octubre.
Para la gobernadora María Eugenia Vidal, será indispensable el corte de boleta, mientras que Axel Kicillof apuesta a retener el voto duro de Cristina Kirchner en el conurbano.
Según los últimos sondeos difundidos en Clarín, Vidal deberá «correr de atrás» y pelear voto a voto con su rival del Frente de Todos. Tras la decisión oficial de no desdoblar elecciones, la gobernadora deberá revertir el complicado escenario que plantea el compartir boleta con Mauricio Macri en un contexto de crisis económica.
Los encuestadores también coinciden que para la mandataria será importante el corte de boleta. El equipo de campaña de Vidal aspira a que los votantes de Roberto Lavagna «usen la tijera» en el cuarto oscuro y metan la boleta de la gobernadora en el sobre.
Desde el oficialismo apuntan que será clave además que en las PASO participe la mayor cantidad de electores para mejorar su performance en las urnas. Alientan especialmente la participación de los adultos mayores, por ser un universo afín al macrismo.
En tanto que Kicillof, según Perfil, apuesta a retener el voto duro de Cristina Kirchner por la gran imagen que la expresidenta tiene en el conurbano, uno de los sectores más golpeados por la recesión.
El equipo de campaña del ex ministro de Economía confía en que logrará conservar la mayoría de los votos del kirchnerismo a nivel nacional. A su vez, Kicillof tiene otro punto a su favor: su compañera de binomio es la intendenta de La Matanza Verónica Magario, jefa comunal del distrito más poblado de toda la Provincia.
El economista estuvo en los últimos días en Azul para tratar de captar el voto del campo. Tras el histórico enfrentamiento por la 125, la relación entre el kirchnerismo y el sector agrícola-ganadero se fracturó definitivamente y se convirtió en el segmento del electorado más reticente para el espacio que representa Kicillof en la Provincia. (IProfesional)