La Lepra rescató un punto ante el Taladro
Newell’s empató 1-1 ante Banfield en el cierre de la Superliga. El Taladro fue muy superior y logró abrir el marcador a los 10 minutos del segundo tiempo a través de Agustín Urzi. Sin merecerlo, la visita encontró la igualdad a los 23 minutos, con Teodoro Paredes tras un córner.
Banfield empezó el partido enfocado y activo. En siete minutos forzó a Aguerre dos veces, que en la segunda falló de arriba y Bertolo no pudo aprovechar.
El Taladro de Hernán Crespo continuó con su intensidad, sobre todo por la derecha, y superó el plan de contención de Héctor Bidoglio, con tres volantes en el medio. Más Formica, Maxi y Alexis Rodríguez para la ofensiva.
A los 20 minutos, el local ya había generado cuatro situaciones de gol pero sin eficacia en el área. Gómez, quien ganó una y otra vez por derecha, llegó al fondo y habilitó a Carranza. El delantero cabeceó afuera y se perdió el primero.
Con esa quinta ocasión de riesgo, la cuarta generada por la derecha, los hinchas de Newell’s no sabían si festejar su fortuna de sostener aún el empate o maldecir por la fragilidad de esa defensa.
Algún optimista habrá imaginado: «Si esas no entraron lo ganamos nosotros». Y eso estuvo muy cerca de ocurrir a los 40 minutos cuando Formica quitó una pelota en la mitad de la cancha, asistió a Alexis Rodríguez y el pibe le cedió el gol a su primo pero la Fiera le dio de cachetada con el pie derecho en lugar de empujarla de izquierda y el tiro se fue apenas, apenitas, afuera. Fue la más clara del primer tiempo.
Esa chance de abrir el marcador tonificó a los jugadores leprosos, quienes parecieron advertir que el local dejaba espacios en el fondo.
Sin embargo, la última de peligro de esa etapa fue para Banfield aunque Bertolo fracasó en la definición. La mala puntería fue un mal que padeció nada menos que el equipo de uno de los mejores 9 que tuvo la selección nacional.
Entretiempo. Quince minutos de charla técnica para revisar los errores. Ánimos renovados. Nada de eso. A los pocos minutos Gómez volvió a desbordar por derecha y los delanteros fallaron. El cero seguía como mejor aliado del club del Parque Independencia.
A los 10 minutos, cuando se estaba por cumplir la hora de dominio continuo del Taladro, Agustín Urzi le robó una pelota a Requena y definió junto al palo derecho de Aguerre para el merecido 1-0.
Bidoglio se vio obligado a cambiar y buscar algo más en ofensiva. Probó con Víctor Figueroa por un flojo Cacciabue.
No hubo un cambio brusco de la Lepra pero sí es cierto que de los pies del ingresado nació el empate. Figueroa ejecutó un tiro de esquina desde la derecha, Requena conectó, Cambeses rechazó a puro reflejo pero al final llegó Paredes para anotar el 1-1. Tan inmerecido como celebrado por los rojinegros, este sábado de blanco.
El técnico quiso ajustar un poco más la potencia arriba y mandó a la cancha a Leal por Formica (El Gato se enojó por la modificación pero hizo poco y nada en la tarde del sur de Buenos Aires).
Newell’s mejoró, Banfield se cansó y salvo dos jugadas anuladas por fuera de juego el partido se diluyó hasta el 1-1 final.
El rendimiento leproso fue preocupante pero el punto sirvió para elevar a 29 puntos la floja cosecha en esta Superliga, que lo condena a pelear por no descender en el próximo torneo. El Taladro se quedó con la misma cantidad de puntos y en el próximo año futbolístico también estará en peligro por los promedios: tiene apenas 8 unidades más que el rojinegro. Se viene una lucha de pobres en el segundo semestre de 2019.