Maduro resiste, pero la toma de Caracas sería inminente
A cada instante que transcurre, la crisis de Venezuela se profundiza aceleradamente y no pasa un día sin que no surja un elemento que la ahonde aún más.
Entre la población se incrementaron los comentarios boca a boca sobre que “en los próximos días se concretaría la toma de Caracas”.
Al momento de tomar cuerpo esta columna, la Organización de los Estados Americanos (OEA) aumenta la presión política, a la vez que la comunidad diplomática internacional subraya la coacción sistémica que ejerce el gobierno cubano a través de sus enviados a territorio venezolano –con la anuencia del presidente Nicolás Maduro-, contra la cúpula de las fuerzas armadas venezolanas.
A lo apuntado se suma la Organización de las Naciones Unidas para que de inmediato se busque una solución definitiva a la crisis. Clamor este que agrega –obviamente-, la oposición conducida por Juan Guaidó, quien dejó claro que “todas las opciones se están agotando”.
Contra la influencia cubana Guadió contrapuso un pedido de ayuda urgente a la comunidad latinoamericana, debido a que es insistente la versión en Venezuela que señala que Turquía, España y Sudáfrica habrían ofrecido una “salida” a los generales de Maduro antes que recrudezca el bloque bancario y financiero en el Estado venezolano.
Guaidó habría dejado trascender que se espera una demostración de fuerza y es por ello que los generales del régimen están analizando minuciosamente como sacar a sus familias del lugar donde se desarrolla el conflicto que nos ocupa.
Bloqueo naval
Otras fuentes indican que un bloqueo naval estaría a punto de desencadenarse con el objetivo preciso de frenar el envío de petróleo a Cuba, a la vez que ya no resiste el menor análisis que la crisis humanitaria se potencia minuto a minuto.
Torturas
La ONU hizo alertó a sus asociados sobre muchos casos de torturas, algunos de los cuáles han sido filmados y reproducidos a través de las redes de comunicación.
Carlos Brillembourg, representante del Foro Penal en Argentina hizo referencia a que “se han producido en Venezuela, al menos, 1.400 detenciones y 140 asesinatos por parte del fuerzas militares y paramilitares del gobierno” y recalcó que “hay numerosos presos políticos en prisiones, tanto en cárceles como en dependencias del organismo que conduce la inteligencia en ese país”.
Brillembourg representa a un organismo que apoya a arrestados y a sus familiares.
Funcionarios de Jair Bolsonaro dejaron trascender que “nadie quiere una guerra en Venezuela”, aunque no descartan algún movimiento de fuerzas militares “ya que Maduro es un criminal”.