Cierran 25 pymes y 80 comercios por día en la Argentina
Los empresarios cuestionan la nula reacción del Estado, que encima les aumenta los impuestos.
Mientras el Gobierno celebra la estabilidad del dólar y le muestra orgullosamente al FMI el cumplimiento de las metas fiscales a partir del ajuste realizado, la recesión hace estragos en la economía real.
Los últimos datos manifiestan que se están cerrando en promedio 25 pymes por día a nivel nacional y 80 comercios solamente en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.
«Es el número que estamos manejando con la UIA (Unión Industrial Argentina), pero no llega a representar la gravedad de la situación. Porque si bien es una cifra enorme de pymes que están cerrando, muchas otras se trasladaron a la economía informal, generando un esquema de precarización productiva que va a tener consecuencias muy graves a futuro», aseguró a este medio Ariel Aguilar, dirigente de la Confederación General Empresaria de la República Argentina (CGERA).
Se suma a esta situación otro dato dramático que se conoció este martes: En diciembre la capacidad instalada de la industria bajó al 56,6%, un registro que es peor incluso que el mismo mes del 2002, cuando Argentina estaba en la pero crisis de su historia.
Para colmo, las autoridades gubernamentales no solo no están ofreciendo ningún tipo de contención, sino que están anulando las históricas herramientas que utilizaba el sector como el financiamiento a tasas blandas del Banco Nación.
A pesar de que su objeto social es la promoción de la actividad económica, la entidad que preside González Fraga suspendió las operaciones de descuento de cheques y no se sumó al plan de apoyo a las pymes «por falta de fondos», pero es utilizada continuamente como caja del Tesoro, que sólo esta semana tomó 40 mil millones del banco para financiar los gastos del Estado.
A su vez, Dujovne recientemente decidió elevar las tasas de las pymes morosas del 3% al 4,5% para los intereses resarcitorios y del 4% al 5,6% mensual para los punitorios, en una insólita medida que no mejorará la recaudación, sino que lo más probable es que aumente los niveles de morosidad.
«Nos destruyen el mercado interno, no tenemos como pagar los impuestos y encima te aumentan las tasas porque supuestamente nos financiamos a costa de la AFIP. Decir una cosa así en este contexto de destrucción de empresas es directamente una provocación, nos están mojando la oreja», reclamó Aguilar.
Por otro lado, otro de los rubros simbólicos del pequeño empresariado -como son los locales comerciales- sufrió un golpe todavía mayor al reportar un cierre de 2.536 comercios en enero, de acuerdo a un estudio de la ONG Defendamos Buenos Aires.
Los sectores más golpeados fueron indumentaria y calzado de mujer, gastronomía, indumentaria y calzado de hombre, ferreterías, gestoría, talleres de reparación de vehículos, bares y remiserías.
En tanto, los peores resultados se vieron en La Plata (77 locales menos), Moreno (-69), Lomas de Zamora y Banfield (-68), Quilmes centro (-67), Florencio Varela (-58), Lanús centro (-57) y Morón (-50).
De acuerdo al director de la ONG Javier Miglino esto implicó una destrucción de 10.144 puestos de trabajo, dado que se calculan cuatro empleos por comercio, incluido el propietario. (La Politica Online)