Docentes anticipan un inicio de clases conflictivo
Quieren que se modifique la cláusula gatillo para que se actualicen los salarios «mes a mes» frente a la escalada inflacionaria.
Por: Lucas Ameriso/La Capital
Comenzó el 2019, y si bien ya está definido el inicio de clases el próximo 6 de marzo, desde la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) Rosario piden la reapertura de paritarias, la modificación de la cláusula gatillo y presagian un febrero «con mucho debate con el gobierno provincial y movilización en las calles. Vamos a tener un año conflictivo como el anterior», estimó el titular del gremio en Rosario, Gustavo Teres, y anticipó que deberían comenzar las reuniones a comienzos del mes que viene.
Los referentes sindicales vienen reclamando desde mediados de 2018 la apertura de paritarias en función de un acuerdo salarial celebrado con la provincia al que calificaron de «poco efectivo».
La cláusula gatillo modificaba los haberes cada dos meses de acuerdo a la pauta inflacionaria trazada a comienzos del año pasado por Nación. «Se llega tarde y mal, por eso habíamos pedido la actualización y un adelantamiento de un mes junto a un bono», indicó Teres. Sin embargo, la conducción provincial no lo solicitó.
«A lo largo del año estamos en un 10 por ciento de retraso que no hemos recuperado ya que no hubo una suba inmediata de haberes, y si se sigue en esta negociación vamos a estar muy por detrás de la inflación», señalo el gremialista.
Entre los pliegos que ya está confeccionando Amsafé Rosario para presentarlo en paritarias figura un diez por ciento de suba salarial para recuperar en 2019, que los aumentos no sean por tramos «porque provoca un efecto inverso y se pierde poder adquisitivo» y, de imponerse la cláusula gatillo , que sea con carácter automático mes a mes.
Entre otros puntos a debatir con el Ministerio de Educación santafesino figura el reclamo por la disolución de la Secretaría de Bienestar Docente, que se había creado en la gestión de Hermes Binner como gobernador pero que se fue diluyendo.
«Ahí se condensan mucho de los reclamos y yerros en la administración y la auditoría de licencias que hemos cuestionado, pero la hicieron desaparecer en el marco de una política de ajuste de este gobierno provincial», cuestionó Teres.
Tras mencionar la famosa frase de que los salarios van por la escalera y los precios por el ascensor, hizo referencia a la puja distributiva, la defensa de las jubilaciones del sector y de la cobertura social de los maestros.
«Queremos el compromiso de que todas las obras de infraestructura van a estar listas; que los jardines de infantes estén terminados para el inicio de clase y se completen las obras en escuelas abandonadas que necesitaban arreglos. Por todo esto creemos que el 2019 será un año conflictivo igual o peor que el anterior, con un comienzo de clase muy movilizado, con los docentes en las calles para ser escuchados y reclamar lo que nos corresponde», se explayó.
Las clases comenzarán el próximo miércoles 6 de marzo y se extenderán hasta el 13 de diciembre. Se espera garantizar 186 días con actividad en las aulas.
El 6 de marzo las aulas se abrirán para los alumnos de nivel inicial y primario. En tanto, el receso invernal de dos semanas ya está pautado que se extenderá entre el 8 y el 19 de julio.
«Hay que avanzar a principios de febrero con la realización de asambleas, reuniones de delegados y encuentros multisectoriales para que el gobierno provincial tome note y los compañeros se apropien de estos reclamos», destacó el líder gremial local.
Entre los temas que Amsafé Rosario quiere poner sobre la mesa de negociación figuran los descuentos «compulsivos» a más de 1200 docentes, «con casos de descuentos a más de 10 mil pesos».
«Esto es una decisión del gobierno de ajustar en la salud de los compañeros docentes», destacó Teres. (La Capital)