Máximo Kirchner sobre La Cámpora y los abusos sexuales: «Militar no puede ser un calvario»
Aseguró que la agrupación se pondrá al frente del tema. «El Loco» Romero no renunció a su banca del Senado.
Con algo de bronca en su tono de voz, Máximo Kirchner cerró un acto en La Plata haciendo referencia al abuso sexual que salpicó a La Cámpora en las últimas horas. «Quiero ser claro: no puede ser un calvario para las compañeras militar en una agrupación política. Deben tener todos los resguardos necesarios», dijo y aseguró que la agrupación se pondrá al frente del tema.
Fue la primera aparición del líder de La Cámpora luego de que una ex militante de la agrupación denunciara al senador provincial Jorge «El Loco» Romero -jefe de la agrupación en la provincia de Buenos Aires- por un abuso ocurrido una noche de enero de 2017.
Máximo cerró el acto fundacional del Ateneo Néstor Kirchner, un armado de la diputada Florencia Saintout que sirvió como virtual lanzamiento de su campaña para intendenta de la capital provincial.
En su discurso el hijo de la ex presidenta hizo una fuerte crítica al gobierno de Mauricio Macri y pidió que el pueblo exprese en las calles su bronca con el gobierno. «Es importante que la sociedad manifieste su descontento», dijo y recordó las recientes protestas de los chalecos amarillos en Francia que hicieron retroceder a Emmanuel Macron y los reclamos por las subas de tarifas en Argentina que revirtieron las decisiones de la Rosada.
Por momentos, Máximo apeló a frases de unidad. «Necesitamos ampliar la base de participación», dijo en un tramo de su discurso. «Acá no hay ni izquierda, ni derecha. Lo que hay es un pueblo que está pasando hambre», agregó más adelante.
Pero la mención al escándalo de los abusos fue la sorpresa. Claro que incluyó críticas a los medios de comunicación, un denominador común en este y en todos los actos de La Cámpora. «Que los que mercantilizaron a la mujer no nos vengan a correr con la vaina de la moralina y la ética», dijo.
«No podemos mirar para otro lado. No podemos dejar que los medios intenten correr a las organizaciones políticas en demandas como las del colectivo de mujeres. Las organizaciones somos atacadas porque somos las únicas capaz de ponernos al frente», agregó.
Máximo no hizo referencia directa a Romero. El senador que dentro de la agrupación responde a la línea de Andres «El Cuervo» Larroque se pronunció el viernes en las redes sociales. Allí aseguró que daría un paso al costado de sus «responsabilidades políticas» para someterse «a los procesos que determine la aplicación del protocolo» con el que cuenta La Cámpora para estos casos y atribuyó su ataque sexual a una compañera de militancia, en que fue criado en «una sociedad patriarcal».
Sin embargo, fuentes del Senado bonaerense aseguraron a LPO que a este lunes no había ingresado ningún pedido de renuncia en la cámara. Por eso, se espera que la cúpula de La Campora tome una determinación al respecto que, a entender por las palabras de Máximo, no sería para nada suave.
La renuncia, de confirmarse, deberá ser aprobada por el pleno de la Cámara Alta, algo que recién sucederá en los primeros días de abril del año próximo. O, en un caso eventual, en una sesión especial. Quien ocuparía su lugar sería la ex ministra de Educación bonaerense, Graciela Giannetassio.
Mientras tanto, en el bloque de senadores bonaerenses de Unidad Ciudadana existe un hermetismo total sobre el tema. Durante el fin de semana había trascendido una posible reunión entre la jefa de esa bancada, Teresa García y «El Loco» Romero. Sin embargo, desde ese espacio desconocían el encuentro.
Un dato interesante: en el acto de hoy se vio a diputados de Unidad Ciudadana de varias secciones electorales, pero a ningún senador del bloque. (La Política Online)