Gobernadores «rebeldes» juntan votos para restablecer el fondo sojero
«Hay consenso para eliminar el DNU en el recinto», aseguró a LPO el formoseño José Mayans. Frigerio negocia uno por uno para calmarlos y no arriesgar la meta fiscal.
Los festejos de Mauricio Macri por aprobar el presupuesto en Diputados ya son historia lejana en la Casa Rosada: un grupo de gobernadores rebeldes amenaza con restituir el fondo federal de la soja en el Congreso y arruinar los planes de déficit cero. Estas furiosos porque las promesas de fondos que hizo el gobierno de Macri para que frenaran la sesión especial en la que iban a derogarlo, quedaron en nada.
«Los gobernadores no están peleando la plata del año que viene, primero quieren que Macri cumpla con lo que prometió este año. Dejaron un montón de obras paradas por la mitad», afirmó a LPO un dirigente de habitual diálogo con los mandatarios peronistas.
El endurecimiento de sus posiciones, se lo comunicaron al jefe del bloque de senadores peronista Miguel Pichetto el martes pasado, en su despacho. Pichetto tiene su liderazgo en crisis de tanto ensayar un delicado equilibrio entre complacer al gobierno y contener a sus pares. «El Presupuesto es el último favor que les hacemos, después de aprobarlo soltamos al Gobierno», argumenta.
Hasta ahora, no logró conmover a los gobernadores rebeldes cuyos senadores empezaron el punteo para dar el batacazo en la sesión del 14 de noviembre, cuando no se sentarán a discutir el presupuesto si antes no se debate la eliminación del del DNU 756/18, que además tiene preferencia para su tratamiento votada hasta por Cambiemos en su momento.
«Ya hay consenso en el Senado para derogar el decreto en el recinto y volver a distribuir más de 100 mil millones entre 2700 municipios», aseguró a LPO José Mayans, espada del gobernador de Formosa Gildo Insfrán. Faltaría que se exprese en el mismo sentido Diputados, donde Cambiemos también es minoría.
Mayans ya está en contacto con Marcelo Fuentes, el jefe del bloque de Cristina Kirchner, que tiene 9 votos para aportar, además de los 2 progresistas que siempre levantan la mano contra el Gobierno.
Los 3 santiagueños permitirían una mayoría simple sólo si colaboran los 24 justicialistas y aunque Pichetto se resiste, no le será fácil puntear votos para reducir partidas a las provincias.
Gerardo Zamora, gobernador de Santiago del Estero, dio otro gesto de discordia esta tarde, cuando recibió en su despacho a Sergio Massa, cuyo bloque de diputados votó en contra del presupuesto. Hablaron por casi tres horas.
A Pichetto lo respaldan Rodolfo Urtubey y Carlos Caserio, pero el trío ya le avisó a Frigerio que es su problema detener la avanzada de los rebeldes antes del 14. Lo mismo le advirtieron en Mayo, cuando avanzó una ley anti tarifas y ante su inacción la sancionaron y provocaron un lamento de Macri que dura hasta hoy.
Los gobernadores rebeldes quieren eliminar el decreto que anuló el fondo sojero en el Congreso. Puntean votos en el Senado para dar el primer golpe el 14.
Frigerio ya tuvo su reacción inicial al cumplir con la atrasada promesa con la fueguina Rosana Bertone y restablecer aranceles para componentes de celulares y televisores importados fuera de Tierra del Fuego, que ensambla esos productos en Río Grande.
Tal vez vendrán varios gestos similares para detener una rebelión que empezó el miércoles 24, mientras se trataba el presupuesto en Diputados, y abrió una grieta entre los gobernadores y dejar el bloque justicialista en una virtual fractura.
Aquel día Mayans asistió a la Casa de Tucumán junto a los mismos gobernadores que visitaron esta semana el Senado: el anfitrión Juan Manzur; Domingo Peppo (Chaco), Gildo Insfrán (Formosa), Lucia Corpacci (Catamarca), Sergio Casas (La Rioja); Rosana Bertone (Tierra del Fuego) y Zamora.
Nunca aparecieron Juan Manuel Urtubey (Salta), Juan Schiaretti (Córdoba) y Gustavo Bordet (Entre Ríos), el trío de gobernadores que prefieren cerrar el año legislativo sin peleas. El salteño es el más contento: es el único que asegura haber compensado el dinero que recibía por el FFS con la adenda al pacto fiscal. Nicolás Dujovne dice que sus colegas también fueron remediados, pero no los convence.
Pocas horas antes de tratarse el presupuesto, el grupo rebelde ya había engrosado la planilla de fondos y avales para obras, pero igual mostró los dientes arriesgando el quórum de la sesión con llamados a sus diputados en tiempo real.
Disconformes con el dictamen definitivo, que habían conocido unas horas antes, consensuaron aprobarlo en Diputados, no alterar su sanción en el Senado pero ir a la carga por el fondo federal sojero.
Mayans llamó a Pichetto para informarle, no logró comunicarse y concretaron una cita para este martes, cuando los esperó con su propuesta de no aumentar el impuesto bienes personales a viviendas únicas publicada en los diarios.
Los gobernadores la aceptaron, pero no se distrajeron de su objetivo original. Molesto, Insfrán le reprochó al rionegrino haber anticipado un fin de año feliz con presupuesto sancionado en tiempo récord. «Si quieren búsquense otro jefe de bloque», le respondió.
Para restituir el fondo sojero no hay que tocar una coma del presupuesto y alcanza con que ambos recintos anulen el DNU con lo eliminó y Cambiemos no tiene el número para frenar a la oposición si se une con ese objetivo.
Logró un simbólico dictamen de mayoría cuando se trató en la bicameral, pero cuando surgió la primera amenaza de tratar el tema en Diputados, Macri tuvo que resarcir a las provincias con 4100 millones por los fondos resignados este año.
Frigerio creyó que los gobernadores habían aceptado negociar el paquete de 2019 con el presupuesto, pero parece que no convenció a la mayoría.
El dinero no sería poco, pero tampoco está claro. El fondo se compone del 30% de la recaudación de las retenciones a las exportaciones de soja, o sea, está sujeto a los valores de la oleaginosa y la cotización del dólar.
Los rebeldes dicen que sería 120 mil millones de pesos, sobre un presupuesto de 4 mil billones, en Cambiemos creen que es la mitad, pero no quieren ceder un centavo.
Tienen dos semanas para negociar y ya hay un menú que puede sondear. Un reclamo repetido es que se cumplió poco y nada con la cobertura del déficit de las cajas previsionales, un compromiso asumido en la ley de reparación histórica a los jubilados.
Insfrán, por ejemplo, dice que no le dieron un peso y la maniobra es que Anses demora sus cálculos actuariales o exija bajar las jubilaciones para ayudar. Debates así se retomarán antes del 14. (La Política Online)