Ladrones robaron a carnicero y huyendo le dispararon a vecina
Tres malvivientes golpearon al comerciante delante de su nieta y escaparon a los tiros
Momentos de extremo dramatismo vivió ayer por la mañana un carnicero de barrio Triángulo mientras atendía su negocio ubicado en Gaboto 5400 al ser asaltado por tres delincuentes con armas de fuego que lo hirieron a culatazos en la cabeza y amenazaron de muerte delante de su nieta de 9 años, que también fue hostigada. Con ese marco violento, el comerciante entregó unos 17 mil pesos de la caja y los maleantes escaparon a los tiros en plena vía publica, donde una vecina fue herida por un proyectil en una pierna.
«Esta es zona liberada. Te roban y arrebatan a toda hora, a mi me desvalijaron la casa hace unos meses y los ladrones se pasean con mi ropa por el barrio», dijo una joven madre que ayer se presentó a media tarde en la despensa y carnicería que Juan y Delia atienden en Gaboto 5432 «a puerta cerrada» y que a esta altura de la circunstancias sólo abren si conocen la cara del cliente.
A media mañana
Ese comercio fue el blanco de un violento asalto ayer a las 10.30 de la mañana cuando Juan se vio sorprendido por tres delincuentes que a cara descubierta y portando armas de fuego ingresaron imprevistamente al salón. El comerciante estaba con su nieta Pierina, de 9 años, que fue testigo de toda la secuencia.
«La verdad que no te puedo decir mucho. El me dijo que entraron tres, lo encañonaron, lo amenazaron y le exigieron el dinero. En un momento se pusieron violentos y le pegaron varios culatazos en la cabeza, uno cerca de la nuca, otro más al costado y uno arriba, pero cuando él vio que también hostigaron y parecían amenazar a la nena, les entregó todo el dinero que había y era bastante», recordó Delia, la mujer de la víctima.
Aún con temor y mirando para los cuatro cardinales detrás de una ventana apenas abierta para dialogar con este diario, la vecina ilustró con ademanes las heridas que sufrió su marido, que en ese momento descansaba, «Mi nietita está muy asustada, imaginate la situación pobrecita, vio toda esa escena violenta, es muy chiquita», narró con pesadumbre Delia mientras recibía el afecto de dos mujeres que intercalaban comentarios sobre un compendio de hechos de inseguridad que padecen a diario.
«Hace unas semanas una mujer fue arrastrada 50 metros en el medio de la calle por uno tipo que iba en moto y le quiso robar el bolso. Una locura. Menos mal que un vecino salió, empezó a tirarles piedras y los espantó. La verdad que te roban a toda hora, está difícil, ya no se respeta nada», lamentaron.
Los delincuentes se alzaron con entre 15 y 17 mil pesos del negocio y huyeron a toda carrera por Gaboto con dirección al oeste. «Iban tirando tiros por la calle», describió un testigo sobre la violenta escena. Pero además de Juan y su nieta, el ataque dejó una víctima involuntaria que salvó su vida de casualidad.
Otra víctima
Es que en ese momento una mujer que reside por calle Liniers se cruzó imprevistamente con la alocada fuga de los delincuentes y resultó herida en la pierna izquierda por un impacto de bala que se le incrustó debajo de la rodilla. Aunque sin riesgo para su vida, ayer permanecía internada en un sanatorio privado.
Según datos preliminares no oficiales, un par de autos habrían servido de apoyo para asegurar la fuga de los malvivientes. Mientras que algunas personas identificaron un Volkswagen Gol rojo, otros sumaron otro vehículo sin determinar marca, pero de colores entre gris y blanco.
Mientras los vecinos de barrio Triángulo reclamaban angustiados mayor presencia policial, desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) se indicó que el caso quedó en manos de la Unidad de Flagrancia en turno a cargo de la fiscal fiscal Silvana Valero.
La funcionaria ordenó la intervención de Gabinete Criminalístico de la Policía de Investigaciones (PDI), toma de testimonios a víctimas y testigos y levantamiento de vainas en el lugar del hecho, aunque no se pudo confirmar oficialmente el calibre y número de vainas colectadas. Además se realizó el relevamiento de cámaras de seguridad de la zona, aunque hasta anoche no se había logrado identificar a los ladrones. (La Capital)