Padres de alumnos de las escuelas dependientes de la UNR temen perder el año
Son alrededor de 4.000 estudiantes del Superior, Politécnico y la Agrotécnica afectados por el no reinicio de las clases tras el receso
Por Guillermo Zysman/La Capital
La decisión de los docentes universitarios de no reiniciar las clases en el segundo cuatrimestre por falta de acuerdo salarial con la Nación puso en alerta a padres de alumnos que acuden a las escuelas dependientes de la Universidad Nacional de Rosario. Plantearon el temor que casi 4.000 estudiantes preuniversitarios pierdan el año académico y contenidos «irrecuperables».
Desde la UNR buscaron «llevar tranquilidad» a la comunidad educativa del Politécnico, el Superior y la Agrotécnica de Casilda, prometieron mediar y destacaron que se apelará a métodos alternativos de enseñanza.
El viernes pasado las dos confederaciones nacionales de docentes universitarios (Conadu y Conadu histórica) resolvieron no arrancar las clases tras el receso invernal.
La decisión gremial, adoptada con altísimo apoyo de las bases en las distintas universidades públicas del país, se adoptó en rechazo a la oferta salarial del Ministerio de Educación, que propuso un 15 por ciento de incremento escalonado, sin cláusula de revisión.
En un escenario de aceleración de la inflación, con proyecciones de aumento del costo de vida cercanas al 30 por ciento, según las estimaciones de las consultoras privadas que releva el Banco Central, la oferta salarial fue rechaza y calificada de inadmisible por los profesores.
Según datos oficiales, a las tres escuelas dependientes de la Universidad local acuden en la actualidad cerca de 4.000 alumnos que según los padres se verán más afectados con el paro a falta de clases presenciales que los universitarios, más acostumbrados a preparar materias libres, sin asistir al aula.
Armando Mujica, representante de los padres de alumnos que acuden al politécnico sostuvo: «Lamentablemente para los chicos, se está perdiendo el derecho a la educación, y no hay nadie que intervenga o que pueda hacer algo al respecto».
En declaraciones a La Ocho, Mujica planteó que «si el Ministerio de Educación no se mueve o intenta alguna solución, el alumno perderá muchísimo. El tiempo que se perdió hasta ahora es irrecuperable. Sabemos que el rector (de la UNR, Héctor Floriani) está pidiéndole permanentemente a la secretaria de Políticas Universitarias que traten de resolver esta cuestión, pero hacen oídos sordos».
En ese sentido contó que días atrás un grupo de padres estuvo en Buenos Aires, en la sede del Ministerio de Educación de la Nación, con la secretaria de Política Universitaria.
«La funcionaria se mantenía en el 15 por ciento que habían otorgado en paritarias. Y cuando le preguntamos si podía haber una propuesta mejor, respondió que lo mejor que les iban a dar a los docentes sería acortar el tiempo en que les iban a dar ese 15 por ciento. Pero que más que eso no se movían».
Según Mujica, las palabras textuales que recibieron los padres desde el Ministerio de Educación para fundamentar la negativa a mejorar la oferta salarial fue: «El país está quebrado y esto es lo que hay».
Los padres replicaron ese argumentando remarcando que se trataba de un grosero error de política pública que afecta el derecho a la educación de los jóvenes. La respuesta de la funcionaria fue: «Si estamos equivocados que la sociedad se exprese en las elecciones».
Para Mujica, «el impacto de no tener clases es distinto en los alumnos preuniversitarios que en las carreras universitarias de la UNR. Para nuestros hijos la clase presencial es importante».
Al respecto advirtió que «la experiencia viene demostrando que los contenidos que no se dictan a tiempo son irrecuperables».
«Después —siguió— lo que pasa es que muchos terminan repitiendo el año y se tienen que cambiar de escuela por no haber podido incorporar los contenidos perdidos».
A criterio de los padres de los alumnos, el reclamo salarial de los docentes es «legítimo» y reconocieron que la llave para destrabar el conflicto está en manos del gobierno nacional, mejorando la oferta salarial que hasta ahora fue rechazada por amplio margen entre las bases.
Y no descartaron hacer gestiones para evitar la pérdida de contenidos y acercar a las partes. (La Capital)