El costo del boleto de colectivo llegó a $14,77 y podría sufrir otro aumento
La concejala Irízar admitió que el Ejecutivo «seguramente» usará el ajuste automático el mes próximo, que se sumaría a la suba de enero pasado
La inflación sigue pegando fuerte en los servicios públicos de la ciudad. El Ente de la Movilidad difundió esta semana los estudios de costos de colectivos y taxis actualizados a diciembre y registró desfasajes significativos con las tarifas vigentes. En el caso del transporte urbano, el boleto real se ubicó en $14,77, una diferencia del 28,5 por ciento respecto a los $11,49 vigentes desde el 1º de enero. En taxis el atraso es mucho más marcado: la bajada de bandera debería costar $42,87, un 50 por ciento más que los actuales $28,60.
El oficialismo en el Concejo admitió que con estos números sobrevuela otro ajuste en el boleto para marzo. «Seguramente estaremos en la obligación de analizar en forma responsable en marzo cómo se reajusta la tarifa», reconoció la concejala Verónica Irízar.
Mientras, los propietarios de taxis anunciaron que concurrirán al Palacio Vasallo para reclamar a los ediles una actualización de «entre el 25 y el 30 por ciento» respecto a los valores actuales, ya que la situación «es insostenible» (ver aparte).
En su primera reunión de directorio del año, el Ente de la Movilidad actualizó los valores de los servicios públicos de la ciudad que venían con notoria demora en su publicación.
En el caso de los colectivos, la tarifa real llegó a $14,77, un 28,5 por ciento más que el valor actual del boleto convencional que pagan los usuarios desde el 1º de enero pasado.
De todos modos, los números reales del sistema se redujeron levemente en el último bimestre del año pasado. En octubre la tarifa real estimada había llegado a $15,14. Esto se debió al menor peso de los subsidios nacionales y locales en el quinto bimestre de 2017.
«Obligación de analizar»
Ahora, con este desfasaje tarifario, la concejala Irízar reconoció que en base a esos números la Intendencia podría utilizar el ajuste automático en marzo.
En declaraciones a La Ocho, la legisladora socialista admitió: «Seguramente con estos números y lo que uno ve, es decir lo que viene pasando en diciembre y enero con un proceso inflacionario que se ha profundizado, seguramente estaremos en la obligación de analizar en forma responsable en marzo cómo se reajusta la tarifa del transporte urbano de pasajeros».
La ex secretaria de Hacienda recordó que en diciembre pasado el Concejo Municipal «modificó la ordenanza de redeterminación de tarifas. Esa normativa preveía ajustes semestrales y se unificó a aumentos trimestrales, dependiendo de este proceso inflacionario que lamentablemente no está siendo abordado de la manera efectiva por el gobierno nacional y que hace que sigamos teniendo una inflación por arriba de dos dígitos».
Al respecto, la concejala oficialista advirtió que «algunos economistas dicen que la inflación de enero estará arriba de dos por ciento, y eso no es una buena noticia».
Irizar defendió un posible ajuste parcial de la tarifa el mes próximo ya que «estos saltos pequeños permiten pequeños ajustes de tarifas, que son más razonables y que no causen tanto perjuicio al usuario».
No obstante ello, la concejala del Frente Progresista resaltó que el límite para que la intendenta Mónica Fein ajuste de manera automática el boleto es el promedio de actualización salarial que mide el Indec.
En ningún caso el porcentaje de incremento puede superar la media de ajuste salarial que releva el organismo nacional. Para que esta cláusula pueda utilizarse, se requiere de la publicación oficial de esa información, que no siempre se hace en tiempo y forma.
La espada del oficialismo en el Palacio Vasallo reconoció por otro lado que la entrada en vigencia del nuevo sistema de transporte «muy probablemente se concrete en julio», como sugirió días atrás el jefe de la UTA, Manuel Cornejo.
De esta forma, por primera vez un integrante del Frente admite públicamente que ya se trabaja con la hipótesis de hacer debutar los nuevos recorridos de colectivos, la gran apuesta del segundo mandato de Fein, recién en la segunda mitad de año, cuando la promesa inicial era hacerlo en el verano.
Sin embargo, los problemas económicos del sistema y la tensión con la Nación por los subsidios demoraron su debut oficial. (La Capital)