Aparecieron pintadas que reivindican a la dictadura en el Politécnico
Las inscripciones aparecieron sobre murales internos. «Es una acción intolerante e irrespetuosa», señalaron desde el Centro de Estudiantes.
El agitado panorama político que atraviesa todo el país en las jornadas previas a las elecciones legislativas que se desarrollarán mañana se reflejó extrañamente con inscripciones sobre los murales que habían pintado alumnos en los muros internos del Politécnico. Ayer aparecieron llamativas expresiones ofensivas sobre la desaparición de Santiago Maldonado con referencias al proceso de la dictadura cívico militar y la utilización de simbología nazi. El episodio caló hondo en la comunidad estudiantil de la institución, y esa reprobación se multiplicó en otros ambientes educativos y culturales de la ciudad.
»En la morgue», escribieron sobre un mural que resaltaba la pregunta: «¿Dónde está Santiago Maldonado?». Justo en la misma jornada en que se conoció oficialmente, a través del testimonio y reconocimiento del hermano, que el cadáver hallado en el río Chubut era precisamente el del artesano.
Muy cerca, sobre otra pintura que pretendía reconocer las tareas de las Madres de Plaza de Mayo, pusieron: «Ni 30 mil, ni inocentes». Además, colocaron la palabra «corruptas» sobre el tradicional pañuelo blanco, y también pintaron una esvástica. Palabras similares fueron escritas sobre una luna blanca.
El suceso generó un clima extraño, bastante denso, dentro y fuera de esta prestigiosa entidad educativa. Muchas dudas e interrogantes se multiplicaron tratando de analizar el accionar sobre estos murales, teniendo en cuenta el marco en el que se produjo la agresión, pintando paredes internas del Politécnico.
Incluso, algunos representantes de grupos estudiantiles se mostraron sorprendidos por el surgimiento de viejos contrapuntos y reivindicaciones que vuelven a salir a escena.
Con este convulsionado escenario, el Centro de Estudiantes del instituto se encargó de expresar su repudio a través de un comunicado de prensa en el que criticó enérgicamente las «pintadas reivindicatorias de la última dictadura militar sobre un mural pintado por estudiantes en la escuela», además no titubeó en calificar a la actitud como «intolerante e irrespetuosa» y, al mismo tiempo, definió el acto como «una provocación» de personas que «avalan la desaparición forzada de personas».
No a la confrontación
En tanto, el texto repartido, una especie de carta abierta, señalaba que, pese a que se viven «tiempos más que agitados a nivel social», el Politécnico no va a caer en «la lógica de la confrontación», que «no es propio de una comunidad educativa» de este tipo, y que va a responder a estas acciones «con más amor, más actividades, más diálogo y más debate». Así, exhibió una postura de moderación y reflexión sobre este extraño episodio, que además se extendió por las redes sociales.
»En el Politécnico no estamos ajenos al clima de época, hace tiempo que vemos cómo de a poco todas las discusiones que ya estaban saldadas, se están volviendo a abrir, y no desde nuevas aristas que no se hayan tenido en cuenta antes, sino con posturas y planteos que ya vivimos y sufrimos en el pasado», se encargó de precisar el comunicado del grupo estudiantil.
Estos alumnos remarcaron que este panorama se percibe «desde comentarios en los pasillos, hasta pintadas en las fachadas», y cerraron: «Nos hacen pensar que se abrió un «vale todo» donde la vida de las personas, el respeto por el simple hecho de ser humanos, ya no son moneda corriente».(La Capital)