Detuvieron en la zona sur a un ciberacosador sexual infantil
El hombre trabaja en una empresa de seguridad privada. Los datos de su accionar llegaron desde un organismo de los EEUU. Este delito tiene una pena de hasta cuatro años de prisión.
Un hombre de 34 años fue detenido ayer en la zona sur de la ciudad por personal de la Dirección Especial de Prevención y Sanción del Delito de Trata de Personas, recientemente integrada a la Policía de Investigaciones (PDI) de la provincia, acusado de cometer grooming, una modalidad de ciberacoso sexual infantil.
La policía llegó al sospechoso después de que el Centro Internacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC) de los Estados Unidos informara de la situación a la Fiscalía Regional Rosario. En ese informe se hablaba de 400 reportes que compartían pornografía infantil a través de redes sociales y diferentes chats desde una computadora cuyo IP estaba radicado en la ciudad.
La fiscal Alejandra Raigal, quien se hizo cargo de la causa, está analizando ahora todo el material que recopiló y le remitió el organismo norteamericano para afinar la imputación que le corresponderá al detenido, que podría llegar a ser una por cada reporte y sumar así una alta pena de prisión.
UN LARGO CAMINO
En el año 2013 el Ministerio Público de la Acusación de la provincia de Buenos Aires rubricó un convenio con el National Center for Missing and Exploited Children (NCMEC) de los Estados Unidos, que se ocupa de fiscalizar el contenido de material pornográfico con niños en redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, YouTube y motores de búsqueda por internet como Google.
Esos sitios denuncian ante el organismo estadounidense las situaciones detectadas y desde allí se remiten, una vez identificado los datos del IP (número que identifica un dispositivo en una red y su localización geográfica), a las Fiscalías de los países que firman convenios con ellos el soporte del material observado. A partir de ello, el Cuerpo de Investigaciones Judiciales del Ministerio Público de Buenos Aires contacta a las Fiscalías Regionales y les suministran la información para que se inicien las investigaciones.
Luego, en octubre de 2014, el organismo estadounidense rubricó otro convenio con todos los procuradores del país. En el convenio se establece un protocolo de intervención inmediata a nivel nacional en casos de grooming y pornografía infantil en internet. Según datos del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe, desde noviembre de 2013 hasta la actualidad Argentina recibió más de 12 mil reportes en donde se ha detectado una actividad dentro del marco de la pornografía infantil, y uno de ellos tuvo epicentro en Rosario en noviembre del año pasado (ver nota relacionada).
EL APRESADO
José Luis B. es empleado de una compañía de seguridad privada y reside en una humilde casa del barrio Mangrullo, en la zona sudeste de la ciudad. Ayer a la mañana varios móviles de la PDI y de la Dirección Especial de Prevención y Sanción del Delito de Trata de Personas llegaron hasta esa vivienda, en cortada Mangrullo al 5200, con una orden de detención gestionada por la fiscal Alejandra Raigal. Fue la primera vez que en un caso de ciberacoso sexual infantil se llega a allanar con una orden no sólo de incautación de material sino también de detención.
De acuerdo a lo confiado por fuentes ligadas a la investigación, sobre José Luis B. pesaban 400 reportes de la NCMEC por «compartir y divulgar material pornográfico con menores».
En ese sentido, el vocero indicó que el detenido no producía material pornográfico, sino que compartía en las redes el material cuestionado que le llegaba desde otros operadores.
DELITO POCO PERSEGUIDO
«No son casos sencillos de trabajar debido a que la información que remite el organismo norteamericano está encriptada y sólo puede ser desbloqueada a partir de un password que ese mismo centro internacional remite directamente al fiscal. Luego hay que peritar las imágenes o videos e insertarlos en el soporte documental de la investigación», explicó un pesquisa. En tanto, agregó, «al IP que informan desde Estados Unidos hay que ubicarlo en el domicilio desde el cual el sospechoso acciona su teléfono o computadora. En ese sentino los smartphones, que brindan las mismas funciones que una computadora, entorpecen bastante las pesquisas porque al ser portátiles cambian de lugar permanentemente y es más difícil hallar al usuario. Por eso lo destacable es que esta es la primera vez que un detenido será imputado en la provincia por violar el artículo 128 del Código Penal», explicó el vocero. Y remarcó que «Santa Fe es de las pocas provincias en la Argentina que persigue este delito».
Al respecto, vale aclaraR que el artículo 128 del Código Penal dice textualmente que «será reprimido con prisión de 6 meses a 4 años el que produjere, financiare, ofreciere, comerciare, publicare, facilitare, divulgare o distribuyera por cualquier medio toda representación de un menor de 18 años dedicado a actividades sexuales explícitas o toda representación de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales, al igual que el que organizare espectáculos en vivo de representaciones sexuales explícitas en que participaren dichos menores». (NotiExpress)