Juan José Valle todavía espera
En 2005 presenté un proyecto de declaración en el Concejo Municipal de Rosario (aprobado por unanimidad y seguido por las aprobaciones de los Concejos de San Nicolás y Villa Constitución) para que el Congreso nacional modifique el nombre de la autopista a Buenos Aires, Pedro Eugenio Aramburu, debido a que los vecinos de las localidades unidas por esta importante arteria vienen solicitando que no puede existir más en estos tiempos el nombre de un asesino en la misma. Por eso se solicitó el nombre en forma reivindicativa de Juan José Valle, ejecutado por dicho ex presidente de una manera anticonstitucional en 1956, junto a otros militares y civiles (total 27) que querían que volviera la democracia en la Argentina.
La memoria es lo que hace grandes a las naciones para terminar con ese pasado que sobrevuela siempre en nuestro país. Otra de las paradojas de este caso es que el nombre de la misma fue puesto e inaugurado por otro genocida, el ex general Jorge Rafael Videla, el 5 de octubre de 1979.
Cuento que la primera vez que lo propuse fue en el 2001 y después de casi una década descansa en el Congreso de Nación, donde fueron notificados por carta documento (el bloque FV, bloque Peronista, etcétera).
Muchos vecinos y viejos militantes peronistas seguramente por su edad no van a poder ver esta reivindicación concretada. Mientras tanto seguirá la impunidad histórica de que un asesino (Aramburu) esté por encima de un verdadero patriota y defensor de la democracia: Juan José Valle, fusilado por el levantamiento del 9 de junio, el 16 de junio de 1956.