El Concejo Municipal busca un acuerdo a corto plazo por el tema de la basura

El contrato se vence a fin de mes. El Ejecutivo mandó recién semanas atrás un pedido de prórroga. La oposición quiere una discusión de fondo

La disposición final de unas 800 toneladas de basura diaria que Rosario vuelca en un predio de Ricardone se jugará por estas horas su carta decisiva. Con el contrato por vencerse el 30 de este mes, el Concejo buscará darle una salida a un pedido que, para muchos ediles, «llegó desde la Intendencia tarde y sin chance de elegir otro lugar».
De esta forma, una parte de la oposición ensaya una alternativa a otros cuatro años de contrato con la firma Resicom, a cargo de la disposición final de los residuos. «Vamos a plantear 6 meses de prórroga para que trabajemos en forma intensiva y con tiempo para definir exigencias y requisitos para una nueva concesión», planteó el edil justicialista Eduardo Toniolli.
El 1º de enero de 2017 vence la prórroga firmada en 2015 por 24 meses. De no ser avalado el nuevo contrato por el Concejo, la ciudad se quedará sin lugar para depositar la basura.
El contrato prevé llegar a un enterrado de 800 toneladas diarias a un valor de 795 pesos la tonelada, lo que arrojaría un certificado de servicios del orden de los 760 millones de pesos.
Se trata de un contrato directo, que deberá contar con el acuerdo del Palacio Vasallo pero que no deja chances por la premura de los plazos y la falta de opciones. Recién en un año podría estar disponible el relleno de Villa Gobernador Gálvez.
En esta coyuntura, las comisiones de Servicios Públicos y Ecología acordaron declararse en estado deliberativo hasta pasado mañana y en un cuarto intermedio «expectante». Junto con Gobierno, ambas comisiones deberán tratar este jueves el mensaje de la intendenta Mónica Fein.
La comisión de Servicios Públicos Concedidos estuvo presidida por su titular Carlos Comi, y contó con la participación de los socialistas Verónica Irizar y Enrique Estévez, los kirchneristas Toniolli y Marina Magnani, el pedepista Aldo Poy y Renata Ghilotti por el PRO.
«Vamos a plantear una extensión del contrato por 6 meses y, durante ese lapso, trabajar opciones para una licitación. Queremos que el municipio ponga recursos para los centros de reciclado y avanzar en mecanismos para enterrar menos y reciclar más», destacó Toniolli.
El presidente de Servicios Públicos consideró que «lo más sano sería buscar una prórroga que nos permita hacer un llamado a licitación pero con un tiempo suficiente para que el Ejecutivo pueda licitar. De no ser así, vamos directo a votar el mensaje de la Intendencia para un nuevo contrato». Comi fue el autor de la ordenanza de Basura Cero, que preveía plazos para llegar al reciclado completo.
«Son enunciados muy importantes pero cuesta materializarlos, en números vamos en contra de las pautas consumistas de estos tiempos. Hay que educar para reducir y seguir en este camino», reflexionó.
Mirko Moskat, del Taller Ecologista, dijo que «hubo poco margen para la discusión, porque nosotros planteamos cambios estructurales que se incorporen integralmente, como la separación de lo orgánico de lo inorgánico que hoy es absolutamente voluntarista». (La Capital)